Por la liga femenina Nacional derrotó a Aguada por 52 a 39  y de esta forma se quedo con el tercer puesto de la copa de Oro,  cerrando así un gran año, al igual que su rival de turno, dejando en claro a donde quiere llegar el femenino.

En el Polideportivo de Comandante Braga, las bolsilludas dominaron desde el comienzo del encuentro, utilizando la defensa como el principal argumento para estar arriba en el tanteador. Representación de la buena defensa fue el score al término del primer tiempo de 19-10 a favor de las locales. En el tercer chico la tónica fue la misma, pero con porcentajes de goleo más altos para las aguateras, que de todas formas se veían superadas por un elenco albo que siguió estirando diferencias hasta terminar el tercer período 33-20 arriba. Sobre el cierre ya, se hizo más corrido el encuentro, abriendose el aro para ambos bandos y terminando el encuentro 52-39 para las dueñas de casa.

Más allá del resultado final y como quedaron paradas en la tabla, ambas instituciones cerraron una gran temporada. Por un lado, las de la calle San Martín no pudieron repetir lo de años anteriores y quedaron fuera de la final, pero dejaron en evidencia que el campeonato femenino se está haciendo más competitivo y ellas fueron parte de eso. En una semana encararon dos partidos con el invicto Goes y lo hicieron de buena manera: En el primero dominaron en gran parte del encuentro pese a tener un plantel diezmado y en el segundo enfrentamiento sorprendieron reaccionando cuando estaban abajo en el tanteador. A su vez hicieron un buen papel cada vez que se cruzaron con Malvín y ganaron con autoridad ante los otros rivales. No habrán llegado a la final como años anteriores pero estuvieron a la altura de un torneo competitivo y demostraron tener la capacidad y las ganas de seguir creciendo.

Por su parte, Nacional también a demostrado querer seguir creciendo y al igual que las aguateras,  entendió el significado de eso a la perfección. En el año de su regreso a la competición del básquet femenino, lo hizo de gran manera, y la presencia en el podio es lo que se vio, pero detrás hay trabajo y esfuerzo de directivos, varios entrenadores, delegados y coordinadores que dedicaron muchas horas a este proyecto femenino.

Compitieron a nivel mayor y U18 pero a su vez tienen distintas categorías entrenando. Para este torneo decidieron traer una extranjera, primero Noelia Mendoza y luego Caterina Manzoni. La directiva de Nacional puso al básquetbol femenino a la misma altura que el masculino, tanto en primera como en formativas y desde allí mostraron  un cambio y demostraron que si se toma en serio, el deporte de mujeres puede crecer.

El resultado de este encuentro quedará como anécdota pero lo que si debemos recordar y destacar es el ejemplo y dedicación de Aguada y Nacional por hacer crecer el básquetbol femenino en sus instituciones y sin darse cuenta, en todo el país. Ejemplo que se vio reflejado en la participación de este torneo y esperemos inspire a otros clubes, que aún no incluyeron el baloncesto de niñas y mujeres.

Foto: Martín Elgue