Casademont Zaragoza de Joaquín Rodríguez cortó la mala racha en su visita al Bursaspor por FIBA Europe Cup.
El inicio del cotejo fue totalmente contrario al primer juego entre ambos equipos por el mismo certamen, donde Casademont Zaragoza con la defensa intensa característica logró estacionar el juego de los turcos, que ante el impedimento de correr la cancha les costó anotar en el cinco contra cinco. A pesar de este mal pasaje ofensivo de los turcos, el nulo acierto desde los 6.75 de los rojillos impidió sacar una racha considerable para cerrar el primer chico, cumpliendo los primeros 10’ reglamentarios en tan solo 18-16 a su favor.
Con gran poderío en la pintura la visita se hizo sentir, donde a lo habitual de Suljemanovic se le sumó el angoleño Jilson Bango que se iluminó totalmente en el costado ofensivo. A pesar de un mejor inicio en el rebote y en la defensa de los turcos, volvieron a mostrar su poca claridad adelante, sin anotar por cinco minutos, siendo castigados por los dirigidos por Jack Burgess, quien tomó el mando tras la ausencia de Porfirio Fisac por fiebre. Con nueve de ventaja a su favor y con Dubljevic fuera de la cancha por faltas se vió lo mejor del Bursaspor, que generó un montón de pérdidas en el conjunto aragonés y corrió de gran manera la cancha, sumandole la pérdida de estatura. Un buen cierre de Mencía en defensa y la gran actuación de Bango atacando le dió un poco de margen a Zaragoza, que a pesar de ser mejor no logró quebrar el partido, yendose al descanso 37-31.
La vuelta del juego encontró un Joaquín Rodriguez muy participativo adelante que permitió ampliar la ventaja, siendo una amenaza constante en el perímetro, sumándole el factor diferencial de la noche que fue el nulo porcentaje de los dirigidos por Serhan Kavut, que no encontraban un arma ofensiva de jerarquía para cortar enormes sequías goleadoras. Con once puntos de renta, un destello ofensivo de un rachero Bursaspor los devolvió a el juego, acortando la diferencia a tan solo tres puntos, pero la repentina aparición del tiro exterior de los aragoneses permitió mantener la constante renta de nueve puntos, marcando el tanteador 59-50.
A tan solo diez minutos del final la figura rojilla Bango puso un rápido 6-0 para abrir la máxima ventaja del juego, pero tras el minuto de Kavut se vió lo mejor de sus dirigidos, que no entregaron el juego y a base de actitud y buenos tiros mermó de gran manera a los españoles, que buscaron compensar la poca fluidez ofensiva con destellos individuales, quedando muy expuestos en el balance defensivo y sufriendo un enorme parcial de 23-7 en su contra, quedando por debajo del tanteador por primera vez en el juego. Con muchísima fuerza y mas corazón que cabeza, a falta de 20 segundos Trae Bell-Haynes coloca un gol y foul importantísimo para superar a los turcos, aunque marró el libre, sufriendo una anotación rápida en manos de Mustaf para igualar el juego en 78 a falta de 16 segundos e irse a tiempo suplementario.
Desde el arranque del tiempo extra se vió mucho nerviosismo de ambas partes, con poca efectividad en los tiros y ventajas cortas, donde desde los dos lados se quedaron a orillas de quebrar el juego. Con muchas faltas y tiros libres, el score marcaba 87-86 a favor del locatario, donde Jaylon Brown encestó dos de los tres libres a su favor, fallando el último el cual fue clave en el desenlace del juego, ya que con poco más de una posesión de juego en el reloj, Bell-Haynes volvió a ponerse la capa de superhéroe, atacando el aro y finalizando de gran manera, colocando toda la jerarquía para encestar el 2+1 clave para llevarse el juego 89-87 a su favor.
Joaquín Rodríguez fue clave, saliendo de titular y anotando 9 puntos, 3 asistencias, 1 rebote y 1 robo en 17:39 minutos, contando con 66% de acierto en tiros de campo.
Lo próximo de Joaquín será el sábado 2 de noviembre, donde enfrentará de local al Breogán por Liga Endesa.