Malvín superaba con holgura a Urunday Universitario como visitante, cuando el encuentro fue suspendido por problemas con el tablero electrónico.
Las playeras comenzaron mejor el encuentro, lastimando con puntos de segunda oportunidad y logrando correr la cancha para colocar un primer parcial de 8-0. Tras minuto de González, Urunday logró responder desde el perímetro y con Mía Nilo mostrando muchos fundamentos para atacar el aro. Las de Juan Serdio trabajaron bien desde el extra pass y con efectividad desde la línea de tres puntos y Carolina Fernández certera, se escaparon en el score sobre el cierre del primer cuarto para irse ganando 26-13.
El segundo chico lo abrió Josefina Haretche con una bomba y una bandeja en transición rápida para achicar la desventaja. A partir de eso, Malvín comenzó a lastimar en el juego interno, con Caro Fernández manejando los hilos y el pick & roll a la perfección para que las visitantes abrieran veinte de renta. Las estudiosas encontraron dos bombas en transición consecutivas en manos de Milagros Rivero para achicar pero un muy buen ingreso de Emilia Larre Borges fue clave y las de la Avenida Legrand volvieron a irse con una ventaja importante al entretiempo, 53-30.
Malvín comenzó el tercer cuarto con un contundente parcial de 15-0 a su favor en los primeros cinco de juego, dominando en todos los aspectos ante un rival que rotó el equipo y estuvo inconexo, aunque falló algunas anotaciones claras. Comenzaron a aparecer las fallas con el reloj pero luego de algunos minutos el juego se reanudó. Urunday consiguió sus primeros puntos a falta de 3:53 en manos de Abril Ramírez. Pero la visita no aflojó y con el tridente Fernández-Jourdheuil–Miculka en gran forma se fue al descanso 77-34.
Fue allí que en plena reanudación para el último chico que el tablero electrónico se apagó por completo y tras algunos intentos fallidos de reconectarlo, el árbitro Diego Ortíz decidió suspender el encuentro, que aún no tiene fijación para el pico restante y será reprogramado.