Peñarol derrotó a Aguada 95-78 en un partido muy forzado donde sacó luz en el final, principalmente gracias a Emiliano Serres y puso la serie final 1-2, por lo que mínimo se irá a un quinto juego.
A pura bomba comenzó Aguada con Pereiras, Rudd y Sims por duplicado colocando los primeros cuatro intentos desde más allá de los 6,75. En Peñarol, fue el juego en la pintura de Emiliano Serres lo que le daba puntos, más apariciones de Jayson Granger en el 1 vs 1. Pero, Aguada estaba encendido desde más allá de los 6,75 con 7 triples en 9 intentos en los primeros siete minutos de juego, esto provocó el minuto pedido por Signorelli para intentar que el rojiverde no llegará a tirar con comodidad, cosa que por momentos logró y evitó así que la visita anotara y de la mano de Vargas y Granger logró ponerse a un triple, pero la última la tuvo Aguada y una vez más desde más allá de los 6,75, Santiso puso el triple para irse ganando 29-23 al término de los primeros 10 minutos.
Con Donadl Sims jugando a un ritmo demoledor, el aguatero abrió la máxima de 10 puntos. Peñarol perdió varios tiros al lado del aro, con pelotas que parecían imposibles de errar. Sin embargo, con Xavier si logró dañar desde el perímetro luego de una muy buena rotación de balón. El reingreso de Granger le dio al equipo un aire distinto y con Zanotta como su principal aliado logró volver a poner al equipo a tan solo una bola. Luis Santos pasó a ser el jugador determinante en el aguatero, pero otra vez sobre el cierre Peñarol que igualó el juego con doble de Johnson a 10 segundos del final, pero la última la metió Santos con una bandeja al lado del aro para dejar el marcador 48 a 46 para la visita.
Tanto a tanto comenzó el tercer cuarto, con Peñarol logrando pasar en el marcador gracias a un 2+1 de Emiliano Serres. El partido se hizo de rachas, Aguada corrigió y logró dañar abajo con Rudd, pero Zanotta contestó con una bomba a 45 grados. Lo negativo para el aurinegro fue que Eloy Vargas se cargó de faltas, cuatro a la mitad del cuarto y dejó en colectivas a su equipo, ante un aguatero que desde la línea de libres estaba certero. Las rachas iban de lado a lado. En el final el más claro fue Peñarol que con Washington como figura ingresó al último cuarto ganando 70 a 66.
Con bomba de Serres y Johnson capturando puntos de segunda oportunidad el manya logró sacar la máxima de once (77-66). Esto provocó el pedido de minuto por parte de Germán Cortizas ante un aguatero que se descontroló y pasó a errar jugadas increibles bajo el aro. En el mejor momento de Peñarol y con un Aguada perdiendo los estribos con la quita falta de Luis Santos. Además la caída de una fruta sobre el banco visitante generó demoras y la desesperación del cuerpo técnico de Peñarol pidiendo calma ya que se paraba el juego en el mejor momento del equipo. Al momento de volver al juego, la quinta falta de Santiso terminó por inclinar la balanza a favor del carbonero que con ataques consecutivos supo aprovechar el desconcierto rojiverde para abrir una buena ventaja y terminar ganando 95 a 78.
LO DESTACADO
Enorme partido de Emiliano Serres en el carbonero, atacando el aro en el 1x1 donde se volvió incontrolable para Luis Santos, además de sacarle dos faltas claves en el último cuarto para que el dominicano salga por quinta. También se abrió de tres en momentos claves y puso la bola cuando las cosas no salían. Terminó con 27 puntos y 10 rebotes para un fantástico doble/doble, además de 2 asistencias y una tapa.


UNO x UNO

Granger (7): Demostró su clase y apareció en momentos claves, hoy se dedicó a lo que sabe y hace muy bien, jugar al básquet, en ataque y en defensa, donde “controló” a Sims, que terminó con 30 puntos, pero jugó solo y eso gracias a Jayson. Johnson (7): Primer tiempo desaparecido, en el último cuarto sacó su repertorio y fue vital para el triunfo abultado. Serres (9): Destacado. Washington (7): Primer tiempo donde fue el que sacó la cara por el equipo, en el segundo tuvo más compañía. Vargas (5): Muy lejos de su nivel, por suerte para Peñarol no lo necesitó. Zanotta (7): Apareció en momentos claves como gran socio de Granger. Xavier (7): Muy buen segundo tiempo, apareció de gran manera en el final y contagió con su energía. Osimani (6): Correcto partido defensivo. Rodriguez, Medina, Osores, Rosas (-): Poco en cancha con el juego liquidado. Signorelli (7): Muy buena lectura del partido, vio que el gol estaba en varias manos y mandó a Granger a desgastar a Sims y vaya si lo logró.

Vidal (5): Sintió el partido más de lo esperado para un jugador de su categoría. Sims (8): El mejor exponente aguatero, no hay con que darle, hoy remó muy solo. Pereiras (6): Tractor defensivo, pero no encontró ayudas para controlar a Johnson en el final. Rudd (5): Muy bajo partido de Victor, desconocido y eso lo sintió y extrañó el aguatero. Santos (6): Dominó la pintura durante 20 minutos, luego fue absorbido por Serres y se fue por quinta en dos jugadas casi consecutivas. Zuvich (6): Buenos minutos, le costó un poco atrás en el segundo tiempo, pero cayó en el poso de todo el equipo. Santiso (5): Flojo juego en ataque, donde el equipo lo necesitó más. Atrás fue bueno hasta el último cuarto donde se fue por quinta. Gentille (5): Buenos pasajes ofensivos en el final. Stoll, Fernández, Curadossi y Acuña (-): minutos con el partido liquidado. Cortizas (6): Le costó defensivamente el partido, perdió mucho en ofensiva, más de 20 rebotes con jugadas de segunda oportunidad.
VAR
Andrés Bartel, Carlos Romero y Diego Borghini (5): 30 minutos muy buenos, controlando el juego y llevando los hilos correctamente, pero en el último cuarto clima de la tribuna bajó a la cancha y los abrumó, algunos errores claros y otros polémicos más protestas fuertes hacia ellos sin pitar técnicos cuando correspondía les baja más de un par de puntos.
LO DISTINTO
Hoy se dio el último partido de Diego Borghini como árbitro profesional. Uno de esos jueces que será difícil olvidar, por su carisma, su particular forma de dirigir, su profesionalismo y amor por el deporte de la naranja, hasta ser uno de los más aclamados en Sudamérica en cuanto al básquet adaptado. Pero lo que más se extrañará de este científico loco será su don de gente. Gracias por todo Diego y éxitos en la carrera profesional.
