La FUBB dio a conocer el fallo pendiente de Peñarol para la próxima Liga Uruguaya, la que comenzará con la quita de cinco puntos y 16 cierres de cancha redituables.

Varias denuncias sufrió el Carbonero en la noche en la que el Pato se coronó campeón de Liga. Un salivazo contra el cuerpo árbitral, el lanzamiento de una botella de vidrio hacia la cancha y la agresión de John Flowers, estuvieron sobre la mesa en la noche de fallos de hoy.

Si bien Peñarol intentó deslindar su responsabilidad ante los hechos ocurridos, el tribunal dictaminó ocho cierres de cancha y la quita de tres puntos. A esto se le agrega la sanción de tres cierres por su denuncia en el juego 1 ante Aguada y los seis, además de los dos puntos perdidos, por el fallo del quinto partido ante Malvín.

La sanción del juego ante la Playa, según lo que se votó en su momento, deberá cumplirla integra en la Liga 2022-23, mientras que la sufrida ante el rojiverde, tuvo efecto a partir del 1/6, por lo que el aurinegro, cumplió su primer sanción de cancha en el juego 4 ante Biguá donde ofició de local.

En sintesis, el aurinegro comenzará con cinco puntos menos y 16 cierres de cancha el próximo certamen. A raíz del reglamento que empezó a regir desde el inicio de El Metro 2022, si bien Peñarol ya comenzó a pagar una de sus sanciones, podrá abonar todas las clausuras de su escenario, lo cual seguramente haga, al ser los costos similares al del alquiler de una cancha neutral para disputar sus partidos.

Además fue sancionado John Flowers por cuatro fechas por la agresión a Iván Loriente en la última final, pero este dificílmente vuelva a vestir la casaca aurinegra en la próxima temporada. En caso de retornar a nuestro país, sea al torneo que sea o al equipo que sea, deberá cumplir la suspensión.