Malvín derrotó a Nacional en la penúltima fecha de la Copa de Oro, con bajas importantes. Fiorella Martinelli habló con Básquet Total tras un triunfo donde fue pieza importante con un par de triples en un momento clave y tomando la base ante las ausencias de su equipo.
Por Marcel Rigali
Las playeras aseguraron la primera posición sobre esto comentó: "Fue más complicado de lo esperado. Tenemos varias bajas por lesiones o porque algunas se están yendo al exterior, tanto por estudios, como por trabajo a mejorar allá en la parte profesional y en el básquetbol. Hemos podido conseguir grandes cosas que tiempos atrás era imposible".
Sobre el trabajo de su equipo en femenino destacó: "Malvín es un equipo que viene trabajando hace más de 25 años, que lo viene haciendo ininterrumpidamente y que ha apostado siempre al femenino. Yo creo que parte de eso es por el trabajo que viene realizando Malvín, que siempre fue el único equipo que creo que apostó a las formativas desde un primer momento en el femenino y así hemos llegado a mayores. Yo hace muchísimos años que estoy en el club, estuve dos años afuera nomás. Hice todas las formativas, mayores, es el único cuadro que apostó siempre y que sigue apostando. Por suerte ahora nacieron nuevos equipos que apuestan tanto en mayores como en formativas que eso está buenísimo".
También destacó el trabajo que se está haciendo en formativas: "Este viernes y sábado participamos en un U17 en Defensores de Maroñas, hace dos fines de semana habíamos participado en Goes, en julio hicimos un U14 nosotros en el que trajimos a un equipo peruano y en septiembre nos vamos con todas las formativas del club a jugar una semana en Perú, a jugar partidos allá, que también es parte del crecimiento al que apuesta el club. Cada torneo que hay, Malvín trata de participar y de jugar con lo que pueda. Ayer jugamos con U17 en Maroñas y con U18 por el campeonato, por suerte tenemos un montón de jugadoras, subimos U14 y pudimos comprometernos con los dos encuentros".
Malvín se metió directamente en semifinales y sobre esto reflexionó: "Tiene sus cosas buenas y tiene sus cosas malas. Estar mucho tiempo parado no le hace bien a ningún equipo porque perdés el ritmo que venías llevando, por más que practiques no está bueno parar tanto tiempo. Por el tema de las lesiones nos viene bien, porque tenemos ahora jugadoras lesionadas que necesitan parar. Si bien tenemos un montón de jugadoras U18 que suben a mayores, por momentos el plantel se nos hace corto a la hora de jugar los partidos cerrados, porque encontramos poca rotación desde el banco. Las gurisas jóvenes no se sueltan del todo, no se animan, si bien hace ya dos o tres años, alguna con 15 o 16 años se viene cambiando con mayores, pero no han encontrado su rol del equipo. Ellas no se sienten confiadas y a la hora de cerrar los partidos a veces se nos hace muy complicado. A parte, nosotras ya todas tenemos unos cuantos añitos encima, no tenemos 20 ya".
"Nuestro objetivo es claro, es ser campeonas. Vamos por la copa número 15 consecutiva y no hay duda de eso. Nosotras vamos a llegar de la mejor manera posible. Generalmente en las finales nos sentimos cómodas jugándolas y nos gusta, pero lo que apuntamos todo el año es a ganarlas. El objetivo de Malvín es ese" añadió.
Además, destacó la buena mano del equipo de tres puntos: "Todas las que están en cancha tiran de tres puntos. A veces lo complicado es meterla, pero la que está tira y tiene la confianza tanto del banco, como la de las que estamos adentro. A veces en los momentos más complicados, hay determinadas jugadoras que toman el rol como en cualquier equipo".
En el final también asumió en la posición de base ante las bajas, a pesar de no ser su posición natural: "De chica yo jugaba de base, aunque ya hace unos cuantos años que no lo hago. Me siento más cómoda jugando de perimetral por afuera, pero agarrar la base no me molesta, no es algo que me sea incómodo y para dar una mano hago lo que sea".