Cleveland Cavaliers aplastó a Boston Celtics por 130 a 86 y se puso 2-0 arriba en las finales del Este.

En el primer juego de la serie celebrado el pasado miércoles, los Cavaliers se quedaron con la victoria en cifras de 117 a 104, en un trámite que los tuvo como amplios dominadores a lo largo de todo su desarrollo. Entre LeBron James y Kevin Love se encargaron de aniquilar a los Celtics, combinándose para un total de 70 puntos.

Los dirigidos por Brad Stevens comenzaron con Isaiah Thomas, Avery Bradley, Jae Crowder, Gerald Green y el dominicano Al Horford. Por su parte, los de Tyronn Lue saltaron a la cancha con Kyrie Irving, J.R. Smith, LeBron James, Kevin Love y el canadiense Tristan Thompson.

El encuentro disputado en el TD Garden, presentó un comienzo bastante equilibrado, en el cual ambos equipos intentaban plasmar en el rectángulo sus principales atributos ofensivos. El conjunto local dañaba con los lanzamientos a larga distancia de Gerald Green, que se metió en el quinteto inicial de forma sorpresiva, mientras que la visita tenía un goleo mucho más repartido. De la mano de Kevin Love y Kyrie Irving, en un abrir y cerrar de ojos, los actuales campeones de la NBA colocaron un parcial de 12-0, que les daba la posibilidad de sacar una ventaja de 13 unidades (23-10). Los de Massachusetts no encontraban soluciones defensivas y rápidamente veían como su rival se escapaba en el tanteador, panorama similar al que vivieron hace dos noches.

En los primeros minutos del segundo periodo apareció en todo su esplendor la figura de LeBron James, anotando, asistiendo e incluso colocando varios tapones en defensa. Los de Ohio pusieron un lapidario 18-4, que les permitía abrir una renta de 28 puntos (50-22), marcando evidentemente la cancha y dejando en claro que llegaron a Boston con el objetivo de llevarse ambos partidos, para poder cerrar la llave ante su gente en los próximos dos juegos. El dueño de casa buscaba soluciones en el banco de suplentes, sobre todo en las manos del rookie Jaylen Brown, que al menos le daba un toque de frescura a su equipo. Sin embargo, lo que más sufrían era la muy magra producción de Isaiah Thomas, que no convirtió tiros de campo en la primera mitad. Los primeros 24 se fueron con los visitantes al frente por 72 a 31.

En el tercer cuarto se pudo observar un trámite sumamente goleado, en donde ambos equipos intercambiaban ataque por ataque. Los dirigidos por Brad Stevens tenían en Avery Bradley a su principal vía ofensiva, mientras que los comandados por Tyronn Lue continuaban teniendo a un exuberante LeBron, que era bien acompañado por el resto del "Big Three". Al iniciar el último periodo, Cleveland gozaba de una diferencia a su favor cercana a las 50 unidades. Por lo tanto, los minutos finales estuvieron absolutamente de sobra y sirvieron únicamente para que ambos entrenadores le dieran descanso a sus principales figuras, pensando en lo que será el próximo partido dentro de 48 horas. Finalmente, los Cavs se quedaron con el triunfo por 130 a 86 y se ponen 2-0 al frente en las finales del Este. Los actuales campeones cosecharon su 13° victoria consecutiva en playoffs, igualando la marca histórica de Los Angeles Lakers 1988-89.

En el ganador se destacó la brillante actuación de LeBron James, que anotó 30 puntos y repartió 7 asistencias, bien acompañado por Kyrie Irving con 23 tantos. Por el lado del perdedor, Jaylen Brown terminó como goleador con 19 unidades.

El tercer juego de la serie se disputará el domingo en el Quicken Loans Arena de la ciudad de Cleveland.