Malvín derrotó a Hebraica Macabi por 90 a 64 con gran partido de Allen “Hulk” Durham y todo el equipo, metiéndose en la final del Súper 4, donde lo espera Urunday, que ganó a primera hora.
Tras lo que fue el emocionante juego entre el estudioso y el aguatero, fue turno de macabeos y playeros. Nicolás Mazzarino, Federico Bavosi, Ryan Pearson, Allen Durham y Hatila Passos fueron los cinco de Pablo López. Mientras que Leo Zylbersztein mandó a Luciano Parodi, Leandro García Morales, Martín Aguilera, Sebastián Izaguirre y Jimmy Boston.
Con poco clima desde la tribuna, y pobre juego dio inicio el encuentro en el Palacio Peñarol. Con más falencias que virtudes y más errores y pérdidas que canastas transcurrieron los primeros minutos, que aún así favorecían a la playa. Ambos conjuntos comenzaron a despertar y darle dinamismo al encuentro. Pero duró poco, los de la Avenida Legrand estaban más fuertes y con dos bombazos seguidos de Mazzarino tras dos malas ofensivas macabeas, abrieron 11 de renta y obligaron al primer minuto. Pese a esto las cosas no cambiaron y el score marcó 28-16 para los de la playa al término de los primeros diez.
Buenos minutos del "Pitu", tanto en defensa como en ataque, junto con un triple de Durham estiraban la diferencia a 16. La defensa comenzó a jugar un papel importantísimo. Una presión al hombre de los de la calle Camacuá les ayudó a revertir todo el daño que les estaba haciendo una marca zonal 2-3 de Malvin y les permitió achicar diferencias a nueve con un Zanotta inspirado desde los 6.75. Las respuestas del playero llegaron desde el banco, Pomoli ejecutando una gran labor defensiva y Souberbielle como arma ofensiva lograban una máxima de 20 unidades, con la que se fueron al descanso largo, 51-31.
Los segundos 20 minutos sobraron como quien dice. El nivel volvió a ser el del primer chico, chato, con pocas ideas, pero sumamente favorecedor para Malvín que mantuvo la renta. La pelota pasó por todos y todos se animaban a tirar, con gran efectividad. En estas condiciones los de López aumentaron a 26 la brecha, terminando en 22, transcurridos 30 minutos de juego (73-51).
Un tímido 6-2 macabeo con la defensa como premisa amenazaban con una reacción, pero Santiso con un doble y falta se encargó de que no fuera así. Las diferencias de nuevo a 20 y partido liquidado con ocho minutos por jugar. Los pibes se encargaron de devolver la máxima y el pasaje a la final del Super cuatro y el triunfo playero por 90-64.
En el triunfador se destacaron Durham y Pearson con 16 y 15 unidades, respectivamente. Mientras que en los de Zylbersztein el goleador fue Zuvich con 16 puntos, seguido por Zanotta con 12.



