Tras una gran actuación, Zygimantas Riauka dialogó con la web sobre la victoria olimpista ante Capitol, analizó su tiempo en el club, y habló de lo que deben mejorar.
Sobre el triunfo manifestó: “Es una victoria muy importante, aún más después del último partido que hicimos ante Trouville. Necesitábamos estar unidos como equipo y esto nos ayudó bastante. Hoy tuvimos serios problemas ofensivos, principalmente en el primer tiempo. En el segundo mejoramos considerablemente, rotamos más el balón y seleccionamos buenos tiros para ganar”.
En cuanto a lo personal, hizo autocrítica y se mostró con ánimo de cara al futuro: “He estado teniendo dificultades. Sinceramente no he jugado como me gustaría, me he preocupado más por desempeñarme en un rol específico, que en contribuir en ayudar en todo lo que el equipo necesite. Tengo un partido bueno y dos malos. Debo resolver eso rápidamente, y tengo la esperanza de continuar jugando como lo hice hoy”.
“Q (Newsome) está siendo mi mentor. Todos los días me está ayudando a mejorar mi defensa, cómo hacerlo, cómo marcar a cada jugador y cosas así”, agregó, refiriéndose a algunos problemas que se le presentan en defensa.
Sobre este asunto, el extranjero además comentó: “Los jueces también manejan un estilo distinto en cada partido, a veces permiten que los atacantes sean agresivos, y en otras oportunidades me llaman la atención por cosas pequeñas. Ese tipo de cosas me sacan del partido, pero debo ajustarme al estilo en que cada juego está siendo dirigido”.
De dicha diferencia de criterios en el arbitraje, también pasó a la diferencia entre nuestro básquet, y el de otros países dónde ha estado: “Es más estructurado y estacionado aquí. Por momentos no es tan agresivo, la pelota se queda en un jugador, y en otros países se rota más y todos los jugadores están envueltos en una misma ofensiva. Acá en Olimpia tratamos de hacer eso, tenemos esa cultura de hacer participar a todo el equipo en un ataque”.
Saliendo del rectángulo, pero manteniéndose con los cambios, “Ziggy” se refirió a su relación con el español: “Para ser honesto, este es mi tercer año jugando en un país de habla hispana, porque estuve dos años en España, entonces mi lenguaje ha mejorado muchísimo. Dentro de la cancha no tengo problemas, entiendo lo que el técnico nos quiere decir y lo que cada uno dice. Afuera es otra cosa, casi no hablo con nadie en español entonces no manejo tanto el idioma”.
No solo su progreso con el idioma lo hace sentirse más conectado con las alas rojas, sino también la gente, y el país lo hacen sentirse como en casa: “¡Todo es fantástico! El clima es perfecto, la gente es muy agradable. Voy por la calle y todos me muestran los pulgares en alto y dicen “Olimpia, Olimpia”. No tengo quejas, la verdad. Estoy contento de estar acá, es un buen momento para mí”.
Ya en una conversación más descontracturada, Riauka habló de las fiestas y hasta se animó a hacer su lista para navidad, donde sólo puso una petición: “Todavía nos queda un partido y practicas por delante, aún no empiezan las fiestas para nosotros. Pero si tuviera que pedir algo sería una victoria en el partido que viene”, aunque pensándolo más detenidamente, corrigió: “Bueno, en realidad ganar muchos más partidos sería genial”.
Al finalizar, el lituano contó las cosas que Olimpia debe mejorar y hacer para tener un 2020 soñado: “Tenemos que seguir creciendo, seguir edificando sobre lo que ya logramos. Venimos teniendo buenos partidos, y de la nada tenemos uno muy malo. Ganar y perder es normal, pero pienso que debemos superar eso y ser más constantes. Venir cada noche y dar pelea a quien sea”.



