Punto para campeón

?  28 de mayo de 2019
⏱  20.30 hs.
?   Antel Arena
⚖  Andrés Bartel, Gonzalo Salgueiro y Diego Ortiz.

Llegan en situaciones radicalmente opuestas, eso es claro, pero no por ello menos importante. Sobre todo por la repercusión que la situación en la que están pueda tener en el aspecto anímico. El animo el partido pasado cambió sorprendentemente, Malvín llegaba de ganar su primer partido, tras un 0-2 preocupante. Ademas en el primer tiempo del cuarto punto, parecía que era todo del playero llegando a sacar una renta de 16 unidades. El segundo tiempo volvió a “revolcar” emocionalmente al playero, Aguada pudo dar vuelta el partido a pesar de jugar un mal de arranque y quedó a un partido del campeonato. Finales son finales y los antecedentes no entran a la cancha. Pero está ahí, sucedió y seguramente ocupe algún lugar en la cabeza de los protagonistas.

Comenzando una vez más por lo emocional, para Aguada es clave no querer ganar el partido antes de jugarlo. La ansiedad por la posible coronación va a estar, eso es un hecho, pero hay que controlarla. Todos sabemos lo que representa Malvín en el basquet de esta época, y sin embargo ya relegó dos partidos que parecían dominados. Si bien es cierto que puede volver a suceder, también puede ser que se despierte el equipo de Lopez y de una cátedra de basquet como la del primer tiempo el pasado viernes.

En cuanto a lo basquetbolistico es fundamental que Aguada continue haciendo la tarea defensiva que viene llevando a cabo. Y en eso es clave la presencia y rendimiento de su estandarte Federico Pereiras. Él se ha encargado a lo largo de toda la serie de reducir a la mínima expresión a Nicolás Mazzarino con un incansable trabajo de piernas lo viene agotando, literalmente. Para colmo Marcos Cabot no ha tenido un buen rendimiento y eso dejó al playero dependiendo demasiado del Pitu Santiso en el perímetro. Para los de Pablo Lopez, la clave para seguir con vida y continuar soñando es generar un juego que le permita tener mas variantes en el perímetro, aparte de alguna incursión de Souberbielle con la mano caliente. Y por supuesto, la receta de la casa: “defensa para campeón” sobre todo no darle respiro a Zach Graham que el ultimo partido agarró el juego para él.