Hebraica superó a Olimpia de visitante 95-83 y sumó un punto importante para meterse arriba.
Comienzo de la décima fecha con una necesidad inesperada para un candidato como Macabi. Ganar era imperioso en busca de la clasificación entre los ocho mejores. La baja de Salvador Zanotta, más el estado físico de Luciano Parodi, Sebastián Izaguirre y Jaime Lloreda, los tres sin estar al 100%, ponían un manto de dudas en la previa.
Hebraica saltó a la cancha con la dupla Zuvich – Boston en el juego interno. Comenzó mejor Olimpia con puntos desde el perímetro para ganar 9-5. El macabeo ajustó atrás y adelante gozó de un exuberante nivel de Parodi con goles y asistencias. Además se sumó a la fiesta García Morales, con porcentajes de ensueño la visita terminó 26-16 arriba el primer cuarto.
Para el segundo los ingresos de Agarbado y Blazina solucionaron el problema defensivo del local que decidió atrapar en el pick central y a partir de ahí solidificó el trabajo atrás. Adelante el base Sub 25 tomó protagonismo dotando de orden al equipo que encontró en los tiros de cuarta distancia de Gastón Páez el arma letal para dañar. García Morales estuvo nueve minutos sin anotar y solo puso tres libres en el período, lo sintió el macabeo que se fue 41-35 arriba tras un cierre donde los jueces tomaron un protagonismo excesivo pitando técnicos a los bancos.
En el tercero, con rápido 5-0 Olimpia se puso a mínima. Intratable Loriente con 16 puntos en el cuarto, fue la gran figura a pura bomba ante la pasividad defensiva de García Morales para que el local pasara en dos oportunidades. Hebraica gozó de un buen pasaje de Hicks jugando cerca del aro ante un Lamonte que se vio completamente superado. Triples de Parodi y LGM sacaron al macabeo de la paridad y un gran cierre de Jaime Lloreda que ingresó por Boston –cuatro faltas- le permitió irse 68-60 arriba al último, con una renta exagerada para lo que fue el trámite.
En el cuarto final la jerarquía visitante salió a escena. Parodi desde la conducción, Hicks y Lloreda inteligentes para sacar ventajas ante sus defensores en zona pintada, Izaguirre lastimó a distancia y Leandro volvió a tomar las riendas del goleo. Además atrás el colectivo ajustó sobre Loriente, Lamonte no aprovechó espacios en noche para el olvido y Alexander quedó solitario en su afán por descontar. Quizás Camiña debió poner antes a Páez de destacada labor, ingresó faltando tres minutos con el juego casi resuelto.
Ganó Macabi un juego duro, gracias a su jerarquía y su producción ofensiva.
