Con un ritmo vertiginoso de juego, Lagomar mantuvo su invicto de local en la primera fase de LDA, al superar merecidamente a Stockolmo.
Con bajas en ambos conjuntos, el favoritismo previo era para los dirigidos por Esteban Yaquinta: un equipo que permanece entre los líderes de las posiciones, sumando solamente victorias en casa con un básquetbol certero, dinámico, con precisión en velocidad, que se torna incómodo para los visitantes que han llegado hasta su gimnasio.
El partido tuvo dos tiempos con distintas características: en el primero con acciones equilibradas, donde los ataques encontraban facilidad para superar a las defensas que, si bien durante la noche fueron con referencias personales, no podían contener a sus rivales, quienes con distintas armas sostenían un marcador goleado. Diferentes protagonistas comenzaron inspirados el encuentro tomando ventajas: el local con versatilidad a través de las transiciones o posteos de Victor Andrade que superaba a Tomás De León, y la visita teniendo como motor y referente en ofensiva a la ficha recientemente incorporada Lucio Castellani, muy activo en los primeros minutos. Esta paridad se mantuvo incluso en el resultado final, con empate a 25, en este cuarto.
El conjunto verde lidera el torneo en porcentaje de dos puntos, y está en los tres primeros por aciertos de triple. De estos dos recursos, fue el primero que se tornó determinante para distanciarse en las cifras. A través de distintos diseños, encontró los caminos para llegar a encestar: la movilidad en el perímetro de Jamal Hartwell, con su primer paso explosivo que parece ir directo al aro, pero que la mayoría de las veces opta por un step lateral o trasero, consiguiendo lanzar con mucha precisión. Y también con el aporte de quien hoy fue la figura del partido: Rafael Previatti, ejecutando los pick and roll con Santiago Wohlwend a la perfección, quien además no perdonó en los contragolpes tras pérdidas, comandó a su equipo a un contundente 14 a 0 en este rubro. Tras sacar máxima de siete, Lagomar culminó arriba 43 a 40 esta primera parte.
Con el correr del complemento, Stockolmo comenzó a extrañar las ventajas de integración: la baja definitiva de Emiliano Bonet, y la falta esta noche de Facundo Izarrualde, sumado a la encimada marca que limitaba a Castellani, provocó una sequía de anotación que se prolongó varios minutos. Casi con exclusividad apeló al tiro de tres puntos como mejor opción, y si bien convirtió 13 de ellos en la noche, en el tercer cuarto tuvo un lapso donde erró todo, y concedió un trámite de 15 a 0 tras estar igualados a 43. Esta diferencia, si bien logró ser achicada, se tornó irreversible en el resto del cotejo: Lagomar imprimía una velocidad en los rompimientos muy efectiva, favorecido por el buen ingreso del ex Aguada Matías Benítez, y cerró este tercer parcial arriba 67 a 57.
La parte final continuó con la misma fluidez y contexto de posesiones cortas: a la S comenzaba a apremiarlo el reloj para ponerse en partido: su técnico Andrés Borroni buscó a través de la intensidad tener dos o tres defensas consecutivas que lo ubicaran en posición favorable de igualar, pero no fue el caso. No es casualidad que Lagomar gane en este gimnasio, se siente cómodo, ágil, preciso y tiene jugadores de mucho gol en la mano: hoy seis de ellos llegaron a doble dígito en tantos. Fue demasiado para el azul, si bien no redujo el esfuerzo, desde la defensa siguió siendo superado: el tanteador final de 90 a 81 marcó sus falencias atrás, conduciendo a la octava victoria en el torneo del verde, con un presente de confianza hacia lo que vendrá.
LO DESTACADO
Rafael Previatti: Gran partido del ex Goes: desequilibrante en las cercanías del aro, convirtiendo 19 tantos en 19 minutos producto de cargarse de faltas. Tuvo 75% de acierto en dobles, varios de ellos con un roll largo hacia el aro junto al base, y ocupó espacios para tomar 11 rebotes en una actuación para el aplauso.


UNO x UNO

Wohlwend (7): El capitán tuvo un gran aporte en puntos, asistencias y recuperos. Se adapta perfecto a este juego en velocidad. Hartwell (6): Tras un primer tiempo donde no brilló, luego aportó goles que evitaron la reacción de la S. Moglia (7): Goleador del encuentro: desde la descarga sumó con el tiro exterior y los cortes al aro. Previatti (8): El jugador del partido. Andrade (7): Cumplió con creces en su rol: doble dígito en tantos y rebotes, destacado. Benítez (7): Gran segundo tiempo, en cancha abierta fue indefendible. Superó una fea caída en el cierre. Peña (4): Escasa participación, fue sustituido. Gadnich (5): Sumó en el esfuerzo defensivo. Castro y Echevarría (-): Pocos minutos en cancha. Yaquinta (8): Utilizó a los titulares más Benítez durante gran parte sin perder intensidad, recuperando muchos balones. El equipo tiene buen rendimiento colectivo, con jugadores que rotan el protagonismo y lo convierten en un cuadro difícil de defender y vencer.

Bessio (6): Buen trabajo en general, logró asistir con acierto desde el perímetro y agregó dos triples. Lema (7): Rindió con buena mano en el tiro exterior. En defensa marcó al extranjero perimetral rival, donde al final le costó. Rodriguez (6): Mejor en el ataque uno por uno que en los porcentajes de campo, donde falló repetidamente. De León (5): Tomó varios rebotes, pero le costó defender a los internos rivales. Castellani (6): De más a menos en su rendimiento: trató de asumir con mayor éxito en la primera mitad. Copelotti (7): El mejor del azul, goleador de la noche, mereció incluso más tiempo en cancha. Portela (5): No pudo destacarse, poca participación. Osores (-): Sin minutos para calificar. Borroni (6): Dando ventajas de integración, sus dirigidos plantearon dura batalla en la primera mitad, y luego se fue quedando sin recursos, salvo el tiro exterior. En defensa resultó ineficaz, Lagomar le filtró su defensa reiteradamente llegando a 90 tantos convertidos.
VAR
Carlos Romero, Mauricio Correa y Esteban Ribas (6): Buena tarea de la terna. En el segundo cuarto debieron pitar alguna falta más, pero luego mejoraron en el complemento sin influir en el desarrollo.
LO DISTINTO
Ante la ausencia por lesión de Cristian Modernell, el joven Luciano Torres fue anotado con la camiseta número uno en el equipo del balneario. Fiel a la costumbre de nuestro básquetbol, lució el clásico corte de cabello que se realiza a los debutantes en cada encuentro. Finalmente culminó como uno de los dos jugadores que no ingresaron a la cancha, y festejó junto al grupo en el cierre este triunfo, permaneciendo invictos en su gimnasio.
