Joaquín Jones fue la gran figura del triunfo de Biguá ante Nacional, y tras el partido conversó sobre todo con Básquet Total.
El alero comenzó haciendo una evaluación de lo sucedido en el juego: “Fue importante ganar pero a veces este tipo de equipos donde puede haber diferencia de nivel se hacen más aguerridos. En el primer tiempo aguantaron bien físicamente, tuvieron buenos porcentajes, pero en la segunda mitad nosotros mantuvimos la intensidad y nos dio para abrir una buena diferencia”.
También se refirió a los buenos porcentajes propios y de sus compañeros: “Buscamos correr y generar espacios para los tiros abiertos porque tenemos buenos tiradores, hoy por momentos lo supimos aprovechar. En algunos partidos los tiros no entran pero intentamos mantener la tónica de juego”.
Al consultarle sobre lo bueno que mostró Biguá en el costado defensivo, explicó: “Los físicos parejos permiten mucho cambio de hombre, mucha intensidad en primera línea y eso hizo que ellos jugaran bastante agobiados y nosotros corriéramos”.
La dupla entre Jones y Martín Rojas, que jugará junta en Larre Borges, funcionó de muy buena manera: “Nos conocemos hace bastante, él es un gran jugador y nos entendemos bien. Hoy con más espacios en el segundo tiempo pudimos jugar más sueltos y generar buenas opciones”.
En esta línea Joaquín nos habló de sus expectativas para su segunda temporada en el aurinegro de La Unión: “El año pasado me fue muy bien en lo personal pero en lo colectivo no fue como esperábamos. Había un buen equipo, pero las aspiraciones para este año son buscar el ascenso. Ya estamos empezando a entrenar y eso también va a ser una ventaja que buscaremos aprovechar. Quiero volver a aportar lo mismo que el año pasado y que los resultados del equipo sean mejores”.
Tras la eliminación ante Malvín en la LUB, el alero hizo una evaluación de su temporada y la del Pato: “Fue una Liga bastante dura porque las aspiraciones que yo tenía eran bastante distintas a lo que sucedió, tenía la expectativa de tener más oportunidades de las que tuve pero son cosas que pasan y la cabeza tiene que aprender a manejar esas situaciones. En lo colectivo la llegada del Oso (Martín Osimani) hizo que el equipo aumentara su nivel y terminamos compitiendo de gran forma contra el campeón y lo tuvimos contra las cuerdas. Terminó siendo un balance positivo”.
Para terminar se refirió al Torneo Sub 23 y cómo lo afronta en esta etapa: “La cabeza no está 100% en este torneo, es una realidad, pero sirve para los que hace tiempo que no jugamos. Nos da la posibilidad de correr, tener opciones de jugar más libre y a cada uno le puede aportar desde distintos lados. A mí me va a servir para no llegar al Metro tan fuera de ritmo”.