Los Angeles Lakers atraviesan uno de los peores momentos de su historia, a causa de una reestructuración que busca devolverlo a los primeros planos de la NBA.

En las últimas temporadas, Los Angeles Lakers fueron perdiendo la mística y el potencial, que por décadas los había colocado en la cima del mejor baloncesto del mundo. Por diferentes motivos, los de California dejaron de ser un equipo a temer por el resto de los rivales, que antes le tenían un respeto absoluto, teniendo en cuenta la cantidad de títulos ganados y las estrellas que defendían esa camiseta.

La franquicia tuvo su origen en Minneapolis, la ciudad más poblada del Estado de Minnesota. En su primera temporada en la NBA, la 1949-50, lograron quedarse con el campeonato, luego de vencer a Syracuse Nationals por 4-2, al mando de John Kundla. Un año después cayeron en las finales de división ante Rochester Royals. Sin embargo, en las siguientes tres campañas lograron alzarse con el campeonato de manera consecutiva, teniendo como principal figura a George Mikan.

En 1960, los dueños de la organización decidieron mudar el equipo a la ciudad de Los Angeles, argumentando que en Minneapolis se había perdido el interés por el baloncesto. En sus primeras diez temporadas en California, llegaron a siete finales de la NBA, aunque en ninguna de ellas pudieron quedarse con el anillo. En seis ocasiones fueron derrotados por Boston Celtics, que logró encadenar ocho campeonatos de forma consecutiva. La séptima final la perdieron ante New York Knicks, rival al cual vencieron dos años después, en lo que sería el primer título de la franquicia en "L.A." bajo la dirección técnica de Paul Westhead.

La década de los 80 es sin lugar a dudas la más recordada por los fanáticos de los Lakers, ya sea por la cantidad de campeonatos obtenidos, como por el estilo de juego que plasmaban sobre la cancha. El denominado "Showtime", que tenía como principales exponentes a Magic Johnson, Kareem Abdul-Jabbar y James Worthy, dirigidos por Pat Riley, regalaba en cada partido un espectáculo maravilloso.

Luego de varios años de sequía, Jerry West, general manager del equipo, decide contratar como entrenador a Phil Jackson, seis veces campeón con Chicago Bulls. Los resultados fueron inmediatos, ya que de la mano de la pareja conformada por Kobe Bryant y Shaquille O’Neal, lograron un three-peat entre el 2000 y 2002. Diferencias entre estas dos grandes figuras, determinaron que "Shaq" se fuera del equipo, por lo tanto disminuyeron las chances de lograr un cuarto anillo de forma consecutiva.

Tuvieron que pasar siete temporadas para conseguir nuevamente el campeonato, que sería en este caso por partida doble, venciendo a Orlando Magic y Boston Celtics respectivamente en las finales del 2009 y 2010. Ese equipo tenía a un Kobe en su máximo esplendor, siendo bien secundado por el español Pau Gasol, que había llegado para dar el salto de calidad necesario para quedarse con el anillo.

Dos años más tarde se produjo la salida de Phil Jackson, que dejaba un hueco muy importante, que sería muy dificil de llenar al corto plazo. Los dueños realizaron fichajes de peso, como por ejemplo, Steve Nash y Dwight Howard, que llegaban para formar junto a Bryant un "Big Three". Sin embargo, por diferentes motivos ese proyecto no tuvo el objetivo deseado y se terminó diluyendo rápidamente.

En las últimas tres campañas, los Lakers tuvieron registros de 27-55, 21-61, y 17-65, balances que se habían visto muy pocas veces en una de las escuadras más ganadoras de la historia. Las constantes lesiones y el posterior retiro de la "Mamba negra" fueron determinantes para llegar a dicha situación, sumado a que nunca pudieron encontrar a ese entrenador que lograra revertir el mal momento que atravesaba la organización.

Al iniciar la actual temporada, se produjo la contratación de Luke Walton como director técnico, un coach con muchísimo futuro, pero que no tenía una gran experiencia como entrenador jefe. El objetivo principal era armar una plantilla que tuviera mucho talento joven, que se lo daba Brandon Ingram, D'Angelo Russell, Julius Randle, Ivica Zubac y Larry Nance Jr. A lo que le agregaban la experiencia de jugadores como Nick Young y Luol Deng, con recorrido en la liga.

Después de tener un comienzo bastante prometedor con siete victorias en sus primera doce presentaciones, volvieron a aparecer los Lakers de los últimos tres años, con muchos altibajos y rendimientos muy bajos en jugadores de los cuales se esperaba un aporte de mayor relevancia. De los últimos quince juegos, los "oro y púrpura" pudieron ganar tan solo un encuentro, ante Phoenix Suns, que casualmente es el segundo peor equipo de la Conferencia Oeste, después de los angelinos.

Al no tener ninguna chance de clasificar para los playoffs, el objetivo principal es ir planeando el futuro de la franquicia. Al tener mucho espacio salarial disponible, se espera que en el próximo verano estadounidense llegue alguna figura importante, del estilo Russell Westbrook o Carmelo Anthony, que puedan de cierto modo, ocupar el lugar que dejó vacante Kobe Bryant. Además, si tienen suerte con la lotería, pueden llegar a tener uno de los primeros picks en el Draft, que les permitiría sumar un nuevo talento juvenil a sus filas.

Al estar en un periodo de reconstrucción, los fans de los Lakers deberán tener paciencia, ya que en poco tiempo volverán a tener a su equipo en los primeros lugares de la NBA, como ha sido una constante a lo largo de su historia.