Con una soberbia actuación de Andrés Piñeiro, quien comenzó sentado en el banco, Capitol le dio vuelta a Nacional un partido que parecía imposible y sigue creciendo en la tabla.
El comienzo fue todo tricolor. De arranque un 7-0 para dejar en claro que Anthony Johnson iba a ser imparable en toda la noche, que no había como contenerlo. Los primeros diez se jugaron como una doma, y en ella el extranjero tricolor, muy bien acompañado por Marcelo Pérez, sacaba diferencias. Muy solo Howard Crawford en la visita. 25-13 y a descansar.
Promediando el segundo cuarto, con 4 puntos al hilo de Johnson, Nacional sacó 18. Martín López era quien sacaba la cara por un Capitol completamente superado. Ignacio Cambón corría la cancha y los tricolores dominaban los rebotes en ambos tableros.
Se dio el ingreso de Renzo Lazzaroni quien tomó las ofensivas para él. Para bien y para mal pero fue un cambio en un equipo al cual no le salía nada en ataque. También ingresó Andrés Piñeiro, pero hasta este momento su actuación no conformaba. Los siguientes 25 minutos de partido lo tendrían como figura.
48-30 terminó siendo el resultado de la primera mitad. Y cerraba por lo que estábamos viendo. En el entretiempo un hincha de Nacional exclamó cerca de la mesa: "Al fin ganamos un partido tranquilos".
Con triple de Cambón, el bolso sacó la máxima de 21 al arranque del tercero pero con triples consecutivos de Wenzel y Piñeiro y un doble de López, el Capi se puso a 13. Las pelotas empezaban a entrar y con esto, la historia a torcerse.
Johnson seguía igual de imparable que al arranque. Y así seguiría. Números excelentes en rebotes y puntos acompañados de una infinidad de faltas recibidas. Pero ahora el duelo de extranjeros era más parejo. Crawford se acordó de los dobles largos y con dos de estos, puso a los suyos a 10.
Cuando faltaban dos minutos para el final del tercero, aparecían varios nombres en Capitol y Nacional empezaba a tener sólo uno. Y la visita se llegó a poner a 5, minutos después de haber estado 21 abajo. 67-59 se fueron de cara a los últimos diez, el partido ya había cambiado.
El último cuarto comenzó viendo como Capitol no podía ponerse a menos de 6, los de Lovera mantenían ese margen de ventajas. Incluso no pudo en un penal que Gonzalo Iglesias se perdió en una bandeja.
Pero fue el hombre de la noche, Piñeiro, quien venció esa barrera. Poco más de 4 minutos para el final y los de Frugoni se achicaban la diferencia a 4 puntos. Johnson, como toda la noche, respondía. El foráneo era fouleado constantemente por jugadores cuya estatura no les permitía hacerle frente.
El partido no se cortaba, no se anotaban, casi que se jugaba a reloj corrido. Anotaban poco y nada. Pero Crawford nos tenía guardado un gran final. Doble para ponerse a dos, respuesta de Cambón y terrible triple de Howard sobre los 24, de más de 7 metros para perder sólo por mínima cuando quedaba 1 minuto.
El minuto final fue infartante. Johnson, quien tuvo su punto flaco en la cantidad de libres errados, falló otros dos en el peor momento.
Capitol perdía por uno y tenía la posesión. Y tuvo todo para pasar porque Marcelo Pérez enganchó desde el piso a Juan Wenzel y Sánchez Varela la vio y la pitó antideportiva. Con 38 segundos por jugar, libres y pelota para el alero.
Pero el "6" erró también el primero y metió el segundo con muchísimo suspenso y algo de fortuna. Y, faltando 18 segundos, erró el doble. Johnson la perdió en la ofensiva siguiente. Y la última repuso Capitol con sólo 1 segundo por jugar. El balón fue a Crawford que fue bien defendido por su coterráneo. Alargue en Welcome.
El suplementario fue alternado. Las dos figuras de la segunda mitad, Johnson y Piñeiro se encargaban de los puntos. Y no se sacaron más de un punto de diferencia hasta faltando cuatro segundos.
Con 2:44 por jugar, López fue a la línea y falló los dos. Nacional ganaba y tenía la posesión, volvía a sentirse confiado. Pero Cambón, el único uruguayo que la quería, erraba su segundo triple consecutivo y Piñeiro no perdonaba, doble con tabla y Capitol tomó la delantera.
Otro doble de Johnson, corrigiendo un tiro exterior, otro de Piñeiro. Capitol uno arriba. Nuevo libre del extranjero ex tenas y partido nuevamente igualado. Del otro lado lo mismo, uno de dos desde la línea para Wenzel. Otra vez uno.
Aquí se da uno de los dobles más gritados de la noche. Johnson subió erró pero Marcelo Pérez, en una incidencia en la que Wenzel es cortado en su rostro y debe abandonar el campo, tomó el rebote ofensivo y puso el doble para pasar a ganar a falta de 51 segundos.
Crawford, que tenía cuatro personales al igual que Johnson y ninguno de los dos se podían marcar, puso un nuevo doble a distancia para pasar nuevamente.
Nacional manejaba la ofensiva hasta que faltando 19 segundos, Iglesias cortó a Johnson y lo mandó por enésima vez a la línea. Otra vez uno de dos para él y partido nuevamente igualado con los 19 por jugar.
Piñeiro consumió segundos, se la tenía que tirar él. Estaba derecho. Y penetró con confianza y metió un doble de esos difíciles, que demoran en entrar, con sólo 4 segundos por jugar. Los hinchas de Capitol explotaron. Lovera fue a la mesa para planificar su corta última bola.
La tiró Cambón, exigido, casi cayéndose, no pudo. Enorme punto sacó Capitol. De visitante, después de perder por amplio margen. Y contra un jugador al cual no pudo controlar jamás. Con un gran porcentaje de actitud. De esas victorias lindas para su gente.
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