Aguada venció cómodamente a Hebraica Macabi en la vuelta de la Liga Uruguaya en cifras de 103-82.
El arranque del juego fue entretenido, intenso y goleado, con ambos equipos apostando mucho a jugar con sus internos, favoreciendo esto al visitante, que con Hassell cargando mucho el rebote ofensivo para conseguir puntos de segunda oportunidad, se ponía adelante 10-4 a falta de 6:47. El juego del aguatero era claro, cargar la pintura con las caídas tanto de Hassell como de Holt, pero también con aportes de Sims desde los 6.75, logrando así estirar la ventaja y mantenerse arriba cómodamente, ganando 25-19 con 1:57 por jugar. En el final el trámite se mantuvo incambiado, con una leve mejoría del macabeo, pero que no pudo acortar la distancia, que fue de 29-23 a favor del rojiverde al cabo de los 10 primeros.
En el arranque del segundo Hebraica mantuvo su mejoría, encontrando la ventaja en Draper atacando a Zuvich y con apariciones salpicadas de Hogan tirando desde la cabeza de la llave, logrando achicar a 3 la diferencia que era de 32-29 a favor del visitante a falta de 7:52. La vuelta de Hassell le significó al aguatero la vuelta a la anotación, ya que en el bajo con Frank y con varios puntos tras perdidas, abría nuevamente de 10 de ventaja, ganando 46-36 a falta de 2:57. En el cierre del cuarto la tónica se mantuvo, ya que con un goleo más repartido aprovechando las corridas de Sims, Pereiras y Santiso, lograba mantenerse 10 unidades por delante de cara al descanso largo, ganando 53-43.
En un abrir y cerrar de ojos Aguada le tomó 15 de ventaja al macabeo, manteniendo las formas, caídas de Hassell ante la pobre defensa de Okanu y triples de Pereiras y Sims que tiraban solos ante una flaca defensa amarilla, algo que dejaba al aguatero 63-48 arriba a falta de 6:46. El juego se ensució en los minutos siguientes, con varias pérdidas y pocas anotaciones por lado, pero con un mejor porcentaje en el locatario, que movía bien la bola para encontrar a Haller con dos triples seguidos y uno más de Hogan, acortando a 9 la desventaja, perdiendo 68-59 con 1:56 en el reloj. En el cierre el juego tomó temperatura con el acercamiento de Hebraica y algunas polémicas decisiones de la terna, pero finalmente un bombazo de Sims sobre el filo dejó 74-67 el tercero y con promesa de picante de cara el último.
El epílogo arrancó con un vendaval del visitante, que con un tremendo ingreso de Joaquín Osimani colocando 5 unidades seguidas retomaba 14 de ventaja en los primeros minutos, haciendo estallar a su parcialidad y ganando 81-67 a falta de 7:53. Corriendo la cancha encabezados por Zuvich el rojiverde lograba tomar máxima de 20, ya que el ingreso de Agustín combinado con varios robos en primera línea de Osimani y Santiso, dejaban el juego 89-69 a favor del visitante con 5:08 por jugar. Los últimos minutos del partido fueron con las segundas líneas de ambos en cancha y tomando participación, ya que la diferencia obtenida por el aguatero era indescontable. En este pasaje se destacó Tomás Barragán, quien con dos bombas y una asistencia a Matías Benítez cerraron el juego 102-83 a favor del rojiverde.
LO DESTACADO
Nochón imparable de Frank Hassell en la vuelta al juego. En una cancha que conoce como la palma de su mano, aplicó la inexorable Ley del Ex a un Hebraica que nunca supo como defenderlo. El interno que supo ser campeón con el macabeo finalizó el juego con 28 puntos y 13 rebotes, siendo 7 de ellos ofensivos. Figura y pico.
UNO x UNO
Mayora (6): Redondeó una buena noche Manuel, aportando en momentos importantes en ambos costados. García (4): Completamente dominado durante todo el juego, nunca se sintió cómodo y Hebraica lo sintió. Hogan (8): Vos a lo tuyo nomás Skyler, jugá como si el resto del mundo no importara. Draper (8): Entre él y Hogan mantuvieron al macabeo en el juego. Es determinante cuando toma el partido para él. Okanun (3): Tal vez de las peores noches de Kingsley, sufriendo muchísimo frente a Hassell en ambos costados, nunca le encontró la vuelta ni para defenderlo ni para atacarlo. Haller (7): Le cambió la cara al equipo cuando le tocó entrar, anotando de todos lados y endureciendo la defensa. Massa (6): Entró a tirar y lo hizo de buena manera, manteniendo a su equipo en juego con bolas importantes. Saavedra (4): No logró influir ni mejorar a los suyos. Viatri (4): Le costó bancar a un encendido Hassell. Astramskas (-): Apenas en cancha. Rivas (6): A pesar de que su equipo perdió, le compitió notablemente al campeón y uno de los candidatos al título. Sigue teniendo una pareja más que sólida en Hogan y Draper, pero necesita más de los actores de reparto si quiere llegar lejos.
Santiso (6): Buena noche del Pitu en la conducción, entendiendo que la plata estaba debajo del aro y jugando mucho a ese lugar. Sims (8): El animalito estuvo encendido, pero no tan descollante como otras veces entendiendo que no era su juego el que importaba, pero puso un par de bombas exuberantes en momentos pesados. Pereiras (6): Gran partido de Federico en el apartado defensivo como nos tiene acostumbrados, adelante le costó. Holt (9): Partidazo dominante de Emitt, siendo una bestia cerca del aro y con varias volcadas que hicieron estallar a la parcialidad. Hassell (10): Por lejos de sus mejores partidos en el país. Destacado. Osimani (6): Hoy si se pareció más a lo que Aguada necesita de él, pocos pero buenos tiros y en el momento indicado. Zuvich (6): No fue determinante, pero ayudó a mantener la ventaja desde el bajo. Barragán (7): Que mano tiene este gurí, hay que seguirlo. Gentile, Benítez, Stoll y Acuña (-): Apenas en cancha los pibes que dejaron una buena actuación. Cortizas (8): Le costó hasta que se dio cuenta que para ganar había que poner la pelota abajo. Cuando lo hizo cambió el partido y lo líquido enseguida.
VAR
Andrés Bartel, Vivian García y Rodrigo Prando (4): A pesar de que el juego fue tranquilo, tuvieron un par de errores notorios.
LO DISTINTO
LA dominancia de Frank Hassell y Emitt Holt en la noche de hoy fue realmente fuera de serie, pero la clave sin dudas fue la cantidad de puntos en la pintura del aguatero en la noche de hoy. 60 de los 102 fueron en la zona pintada, un número demasiado alto para cualquier equipo de nuestro medio. Se notó el trabajo.
