El Indio mostró como intención ser un equipo que buscó permanentemente correr, con Taño llevando el ritmo del equipo y anotando en el arranque. Ante un inicio complicado, Quevedo cargó con el goleo desde su 1x1, sin embargo, la primera diferencia la sacó el de la Costa, cuando pudo desde la presión en primera línea con Marcial y Laborde, anotar en situaciones de 1x0 o 2x1. El gris tuvo problemas ante la zona y del otro lado, el verde castigó con Laborde de afuera, y la continuación de Schiaffarino. Si bien la visita consiguió buenos tiros, no tuvo buenos porcentajes y se fue al primer descanso 29-15 abajo.

Tabaré, que perdió ritmo ante la zona, encontró un oportuno robo de Taño, de gran tarea defensiva sobre Marcial o Laborde, para recuperar la confianza y con triples de Cantero y Dos Santos, ante una buena rotación de pelota, rompió la barrera de dos dígitos. Lagomar volvió a ganar aire en el cambio a individual, cuando desde la presión, sumó. Sin embargo, las de Parque Batlle cerraron el primer tiempo con una bomba a tabla de Dos Santos, para cerrar 42-31 los primeros 20 minutos.

Cantero mantuvo la mano caliente y con tres bombas, puso a 8 a su equipo. Si bien Taño tuvo un buen momento generando, tras minuto, el equipo de Castrillón tuvo un buen pasaje atacando el aro. Ante una disminución en cuanto a los porcentajes, el equipo de Rodríguez tuvo más verticalidad ante la zona y con un doble de Franca tras robo, Tabaré logró cerrar a 9 el tercero (58-49).

En su reingresó, Quevedo fue fundamental, prevaleciendo desde el físico para anotar y sumando además una bomba, para abrir 13. Desde su presión, el de la Costa complicó la subida de balón de su rival, que muchas veces atoró su posesión y cuando parecía acomodarse, alguna imprecisión en el toque final y un triple de Quevedo, encaminó la noche para el local. El Indio quemó su última bala con una efectiva presión en toda la cancha, con la cual tuvo resultado, pero ya sin mucho tiempo en el score.