Senegal derrotó a Nigeria por 93 a 87 en calidad de visitante en lo que significó el inicio del Preolímpico en el continente africano.
En el arranque del juego ambos equipos mostraron sus cartas de presentaciónes que prevalecieron en los instantes iniciales y que fueron marcando la cancha. Con un rendimiento más físico que vistoso, Nigeria logró encontrar rápidamente soluciones buscando incansablemente su tiro rápido desde el más allá. En pleno desarrollo del juego y con una paridad absoluta, apareció Chimezie Metu para hacerse cargo del balón y con su lanzamiento y desfachatez a la hora de la penetración buscó marcarle el camino a las verdiblanco. Al festín de los locales se le sumó Uche Iroegbu para también aportar su mano caliente y sacar ventajas llegando al cierre del periodo. Cuando era todo color de rosa para el anfitrión apareció el rendimiento colectivo que había escaseado en los primeros 10 minutos de juego y en un abrir y cerrar de ojos Senegal emparejó la acciones cargando la pintura y terminó abajo por mínima 26 a 25.
En el segundo periodo se mantuvo la misma sintonía del juego. Cada una de las selecciones apostaron a su mejor faceta ofensiva y de ahí en más el cotejo se convirtió en un constante ida y vuelta. La supremacía del lanzamiento locatario se enfrentaba a una selección que se sentía a gusto jugando de espaldas al aro y dañando con los perimetrales. Las apariciones de Mo Faye viniendo desde el banco pero cruciales para que Senegal mantenga el envión con el que terminó el primer cuarto. Daniel Utomi, norteamericano nacionalizado nigeriano, fue quién se encargó de intentar frenar las constantes amenazas de la visita. Alero, devenido a interno, se cargó la responsabilidad en defensa y desde ahí fue crucial para no permitir que Senegal pase al frente en el marcador durante el transcurso del mismo. Su intención no llegó a destino porque en el cierre los dirigidos por Mamadou Gueye pisaron el acelerador y siguieron al frente para irse al descanso ganando 46 a 44.
Tras los 15 minutos nada cambió. La paridad siguió siendo lo constante durante el tercer cuarto. Brancou Badio ingresó desde el banco y fue importante con el constante movimiento del balón y los rompimientos con los perimetrales. El base del Manresa de España asumió la conducción y agravó el problema para Nigeria con su clásico pick and roll buscando la descarga cada vez que el rival se lo permitía. En la otra vereda Iroegbu y Metu eran los que intentaban mantener en juego a los locales con el lanzamiento exterior como principal opción a la hora de atacar. La salidas de la directas funcionaron a la perfección y era el tiro de larga distancia que dejaba a los vestidos de verde ganando 68 a 67 a falta de 10 minutos para eljuego.
Un lapidario arranque de Senegal enfatizando el rendimiento colectivo y con varios protagonistas haciendo su aporte hipotecó las chances locales en el inicio del cuarto. Un parcial de 10 a 2 terminó de desvirtuar a Nigeria que recibía golpes de todos lados y no reaccionaba. Ousmane Diaye terminó de complicar la situación asumiendo el lanzamiento exterior. La presión defensiva en toda la cancha no podía con el constante movimiento del balón y sufría las consecuencias cada vez que la visita iba hacia al aro. Los intentos por dar vuelta el cotejo no llegaron a destino por parte del local y la victoria terminó para el lado senegalés por 93 a 87.
El goleador estuvo del lado del perdedor y fue Chimezie Metu con 22 unidades mientras que en el ganador el goleo estuvo repartido entre Youssou Ndoye con 15 puntos y Ousmane Ndiaye y Brancou Badio con 14 unidades cada uno.