Yale venció a Lagomar en cifras de 58-48 y llevó la serie final a un cuarto juego. El equipo de la calle Gallinal aguantó el aluvión de su rival y puso la serie 2-1.
El juego se abrió con triple de Laila Raviolo para Yale. En el comienzo, el equipo de Rodrigo Briñón fue quien impuso el ritmo del juego, con transiciones rápidas y un juego vertiginoso. Sin embargo, lentamente Lagomar logró estacionar a su rival y se sintió más cómodo para atacar. En el cierre, Raviolo y Santana calentaron la muñeca, y Yale volvió a tomar el liderazgo, cerrando el primero en cifras de 17-11.
El segundo período se abrió con puntos de Melissa Techera. En la recarga, Victoria Pereyra puso sus primeros puntos. Con el correr de los minutos, el juego cayó en intensidad, con ambos equipos sintiendo el vértigo de un partido que prácticamente se jugaba a reloj corrido. Lentamente Lagomar pasó a refugiarse cerca de su tablero, y Antonella Ugolini lo aprovechó dañando desde lejos, dándole a su equipo máxima de 10. En el cierre, un pasaje de Quevedo para las de la Costa acortó el margen, y cerró el segundo en cifras de 26-19 con ventaja para Yale.
El tercer cuarto comenzó mejor para las de Gallinal, encontrando buenas sociedades entre Raviolo y Techera. Sin embargo, Lagomar no dio tregua y pasó a dominar las acciones, poniéndose durísimo atrás y encontrando un enorme pasaje de Victoria Pereyra. La escueta rotación de Briñón le comenzó a pasar factura a Yale, que bajó en intensidad defensiva y comenzó a desgastarse. Cuando el aluvión costero parecía que inclinaba el juego, puntos consecutivos de una enorme Mariangel Santana, volvió a marginar a Yale, que cerró el tercero 37-32 arriba.
El epílogo se abrió con un doble y falta de Victoria Pereyra. En la recarga, Ugolini puso una bomba desde el costado para darle tranquilidad a su equipo. El juego mantuvo la paridad, aunque no se mantuvieron los porcentajes. En el ecuador del último, un momento de inspiración de Mott le volvió a dar 7 de renta a las de Briñón, que volvieron a manejar el juego soportando la tormenta. Cuando parecía que el juego estaba laudado, Vico Pereyra le volvió a dar vida a Lagomar poniendo cuatro puntos al hilo. Tirando libres, Yale cerró el juego y estiró la serie.
LO DESTACADO
El juego de Mariangel Santana fue soberbio. Cuando los flashes y las marcas se iban con Raviolo, la número 12 agarró el juego para sí y la descosió. Su elegancia para jugar, su lectura y su intensidad la hacen una amenaza constante para el rival. Hoy culminó el juego con 14 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias.


UNO x UNO

Podestá (4): Los tiros que tomó fueron los acertados, aunque la puntería no estuvo de su lado. Santana (8): Destacada. Mott (6): No había tenido su mejor noche, pero en el final se recompuso. Raviolo (7): Fue muy bien controlada por Pereyra, pero de todas maneras se las ingenió para sumar. Su energía y ganas están descontadas. Dámela siempre. Techera (8): Partidazo. Controló a Medrick, bajó rebotes y puso puntos vitales. Figura. Ugolini (7): Muchísima jerarquía para jugar. La puso en un freezer cuando fue necesario y tiró cuando la jugada lo pedía. Paez (4): Minutos de rotación. Briñón (7): La resiliencia de su equipo terminó siendo vital para mantenerse en juego. Quizás podría haber rotado un poco más cuando tenía la ventaja para no llegar tan extenuada al cierre.
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Marcial (4): Aparición en cuentagotas. Las faltas la condicionaron. Pereyra (8): Enorme juego. Adelante la puso y atrás contuvo notable a Raviolo. Quevedo (5): “Que la noche sin ti duele” dice la canción. Vaya si le dolió a su equipo el flojo encuentro de la paraguaya. Rolón (4): Le salieron varias pelotas de adentro y se fue ofuscando. Medrick (6): Ganó y perdió, pero no deja de ser fundamental para el buen andamiaje del equipo. M. Martínez (4): No logró meterse en ninguno de los dos costados. El emparejamiento defensivo no la ayudó. Schiaffarino (5): Aportó energía y carpeta. Núñez (6): Su ingreso coincidió con el mejor momento colectivo. Atrás fue importante. A. Martínez (5): Podría haber ingresado antes, pero no logró imponer condiciones. Laborde (-): Pocos minutos. Viazzo (6): Pese a los malos porcentajes, su equipo jugó bien y leyó las ventajas. Se cerró bien y anuló por momentos a Raviolo.
VAR
Vivián García y Franco Dabbisogno (8): Correctísima labor de la terna. Sin fisuras.
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LO DISTINTO
La tarde de Montevideo estuvo sumamente amenazante y por momentos el cielo se cayó abajo. En contra de todos los pronósticos, el juego corrió por los carriles normales y la palabra humedad se nombró poco. En una inteligente iniciativa, la gente de Larre puso a la venta torta fritas, haciendo muchísima más amena la tarde. Matecitos, torta frita y buen básquetbol. Tuki.
