En un partido de grandes rachas, Auriblanco se quedó con un puntazo en su gimnasio tras derrotar a Marne 90-88

El local comenzó con todo, defensa dura al hombre, transiciones rápidas lideradas por Medina, Piñeiro y Nobile y un parcial de 10-0 en menos de dos minutos. Guido Fernández pidió minuto pero poco cambió, los suyos esbozaron una leve reacción, que quedó en eso. Auriblanco siguió intenso con López defendiendo duro, Octavio corriendo la cancha y las diferencias que fueron en aumento  y en menos de cinco minutos de juego el DT del Tifón quemó su segundo minuto. Marne buscó cambios en defensa, recostarse rápidamente en zona para no dejar tanto espacio a su rival, que siguió a paso firme, máxima de 26 (36-10) y se llevó el primer chico 36-13.

Para el segundo cuarto los del barrio Simón Bolívar cambiaron la actitud, salieron a presionar, despertó Trussich, chispazos de Santi Corbo, la entrega de Girbau y el goleo de Curbelo, pusieron un 11-4. El papal ya no estuvo tan cómodo, López no pudo ordenar las ofensivas, el descanso de Nobile y Medina (demasiado tiempo en el banco) le quitaron dinamismo y el Tifón empezó a tomar fuerza, Curbelo se adueñó de las ofensivas, se volvió incontrolable y puso en juego a Marne, achicó a 13, pero el primer tiempo se cerró 54-39 para Auriblanco. 

El tercer cuarto empezó con Marne dominando, Corbo, Girbau pero principalmente la figura de Leandro Curbelo hicieron que en un abrir y cerrar el ojos se pongan a seis (58-52). Auriblanco no hizo pie, le costó hilvanar en ofensiva, se olvidó de correr la cancha, chispazos de López lo mantenían al frente. La visita nunca bajó la intensidad, aprovechó el momento de Santi Corbo, Fefo Trussich y especialmente Curbelo y completó un parcial de 26-8 y pasó en el marcador, tanto es asi que se fue arriba en el tercero 67-64.

Marne salió como si no hubiese mañana, rápido 6-0 para sacar su máxima de nueve. El papal no se sintió cómodo, es verdad que todas las bolas que entraron en el primer cuarto, en el último coqueteaban con el aro y salían, la línea de libres, fue el principal aliado del local. El encuentro entró en modo DTA, hablado, cortado, enredado, y poco jugado, en definitiva el condimento hermoso que tiene la divisional, esto benefició al local que reaccionó, apareció Hecyot Silva, y dos bombas, la primera de Taibo la siguiente de Bonet para pasar (76-75). Miller controló muy bien a Curbelo, la visita se olvidó de todo lo bueno que hizo y con bandeja de Taibo abrió seis 84-78. El cierre tuvo de todo, malas decisiones arbitrales, emociones, con tiple de Di Giorgi Marne achicó a una bola, Miller, para el Auri fue a la línea y puso uno, la última fue para Trusich que lanzó un triple apresurado y no pudo ser, así el triunfo se quedó para el Papal 90-88.

LO DESTACADO

No siempre se destaca a quien gana. Todos los aplausos de la noche se lo llevó Leandro Curbelo. El jugador de Marne la rompió, sacó la cara por los suyos en el peor momento del equipo, lideró la reacción con mucha entrega y goleo, terminó con 36 puntos, pero además todo lo que generó y defendió. Curbelo se ganó este destaque.

UNO x UNO

Nobile (6): Primer cuarto soñado, luego de estar mucho en el banco no fue el mismo, como el equipo. López (5): Vive el partido a mil revoluciones, es el motor del equipo, le faltó pincharla cuando las cosas no salían. Piñeiro (5): Luego de marcar diferencias en el primer chico, se ausentó. Medina (7): Corrió la cancha con gran criterio, la luz en momentos de oscuridad. Silva (6): Fue una noche en la que se dedicó más a hablar que a jugar, cuando lo hizo fue clave para el triunfo. Bonet (7): El francotirador, entró para ser solución desde el perímetro, luego se olvidó de tirar y en el cierre no perdonó. Monteverde (5): Al ringui ranga, entró para marcar a Girbau cuando el pívot de Marne estaba creciendo. Miller (6): Le faltó mayor participación, no entró casi que en contacto con el balón en ataque, en defensa fue el único que pudo controlar a Curbelo. Taibo (7): Veterano de guerra, de esos que no le tiembla el pulso, siempre una solución. Rossano (5): Presencia para cerrar la llave ante las embestidas del Tifón. Jones (7): Comenzó bárbaro, si bien estaban comprometidos dejó demasiado a Octavio y Nobile en plena reacción. Apostó por la experiencia en el cierre y le salió bien

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G.Delgado (5): Buenos aportes en el momento más complicado del equipo.Trusich (7):La última no quiso entrar, es el alma del equipo. Corbo (6): En velocidad es imparable, a veces pierde la cabeza con las protestas. Di Giorgi (6): Apareció muy bien en el cierre, no dio un rebote por perdido.  Girbau (6): Fue un dolor de cabeza para sus marcadores, a la entrega en la pintura le sumó lanzamiento exterior. Curbelo (8): La figura hizo un partidazo, una lástima para él y los suyos que no pudo coronarse con el triunfo. Amarillo, Cáceres, Feijó y Grela (-): No tuvieron una gran participación, pocos minutos. Fernández (2): Ajustó en el momento clave, apostó por los jugadores. Lo del final, por más que su equipo haya sido perjudicado, no puede suceder, los entrenadores y jugadores deben dar el ejemplo.

VAR

Andrés Bustelo, Erick Cedres y Nicolás Sarli (3): Venían llevando muy bien el partido, en el cierre hubo varios pitazos que no fueron acertados, encausaron el encuentro cobrando técnicos y hubo desatenciones importantes en la terna.

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LO DISTINTO

Distinto fue el primer cuarto de Auriblanco  de esos que no siempre se ven y menos en la DTA. Defendió con una intensidad tremenda, movió la bola con suma claridad, corrió la cancha y ahogo anímica y basquetbolisticamente a su rival, marcó la cancha desde el primer minuto y sentenció el partido en este chico que terminó con 36 puntos (5/6 en triples y 9/14 en dobles).