Aguada arrancó ganando en la copa de oro de manera aplastante ante Remeros con una gran actuación colectiva, tras el partido Básquet Total habló con el entrenador aguatero Nicolás Altalef.
Sobre el partido y las primeras sensaciones de un gran triunfo ante un muy buen equipo como Remeros y tras un mes de parate Altalef mencionó: “No sé si es real la diferencia de este partido, porque en esta fase del torneo los partidos van a ser todos muy parejos. Pero para hoy (ayer) se hicieron las cosas muy bien, se respetó todo lo que se pidió en el scouting, se confió en eso y dio resultado. Pero no fue solo eso, también tenemos la posibilidad de tener una rotación bastante amplia y que este equipo no depende de una o dos jugadoras y logramos entender el momento de cada una y eso es lo vital.”
“Teníamos la incertidumbre de lo que nos iba a dejar el parate, que sin duda no nos jugó nada bien. Camila Kirschenbaum y Lara Barbato estaban enfocadas en la selección, otras aprovecharon a hacer algunas cosas personales y hasta la semana pasada no habíamos podido entrenar con el equipo completo, me deja muy contento lo que se realizó dentro de la cancha.”
El equipo jugó de gran manera, sobre todo desde lo colectivo y la intensidad. Complicando mucho a Remeros en la salida y moviendo la pelota en ataque hasta encontrar a la mejor jugadora ubicada para tirar o encaminarse hacia el aro: “La idea para este partido era proponer un ritmo alto de juego, porque Remeros tiene dos pívots bastante definidas como Ornella Bacchini y Melina Zapata. Mientras que nosotras no tenemos los kilos y el físico de ellas en la pintura, son jugadoras más fuertes que las nuestras y buscamos tapar eso con la intensidad y ganarles las ventajas con las corridas. Primero con Ana Paz y Lara, pero las que entraron también lo hicieron muy bien, ahí la rotación nos dio una enorme ventaja y nos permitió tener la cancha abierta que es donde este equipo se siente más cómodo”.
“También me deja muy contento que el equipo trabajó muy bien la pelota en ataque buscando siempre a la mejor ubicada, no generando situaciones forzadas y minimizando errores. Tal vez hoy estuvimos muy flojas en las pérdidas, fueron muchas (22) y es algo que debemos mejorar y lo hablamos mucho. Otro gran trabajo colectivo fue el box out y Remeros era de las primeras en el torneo en ese rubro con las internas y Pía Moyano, que se involucra muy bien en el juego al rebote. Hoy (ayer) lo pudimos neutralizar de gran manera. Además, tuvimos un gran acierto a la hora de anular a su única base natural desgastándola, cambiándole la marca constantemente y yendo a buscarla todo el tiempo para que no pudiera organizar el ataque del equipo y por eso no llegaron las pelotas fáciles al juego interior.”
La liga volvió tras un mes dónde el juego se paró producto de la participación de la selección en el torneo sudamericano. Consultado Nicolás sobre lo positivo lo que dejó este mes dijo: “Diría que el no vernos tanto fue lo más positivo, porque le venimos metiendo bastante con las que pueden venir en la mañana y luego en la noche con el equipo completo. Las jugadoras están muy comprometidas, estoy muy contento con eso. Me parece que el no vernos las caras por unos días nos sirvió muchísimo y regresaron con más ganas, por ejemplo, Camila (Kirschenbaum) llegó de un torneo internacional con el estrés que es conlleva, le dije que se tomara 2 o 3 días para descansar y automáticamente me dijo que no, que esa misma noche estaba para entrenar, por más que esté cansada y estresada quiero estar con el equipo, y eso demuestra el compromiso de las jugadoras.
“Creo que fue un poco por ahí, porque sin duda tenía millones de planes para hacer, pero que tendré que acomodarlos a partir de ahora, siento que el parate nos jugó bastante en contra porque veníamos de una manera ascendente y cerramos jugando un gran basquetbol.”
Consultado sobre cuál es el objetivo del equipo que se armó para campeón dijo: “Tenemos un objetivo muy claro que es meternos entre las cuatro de arriba, ojalá lo podamos hacer primeras o segundas para tener la ventaja en semifinales. Pero el objetivo ahora está bien claro y es poder meternos entre las cuatro. Me gusta ganar, y es a lo que vamos a apuntar, pero también tenemos que aprender a perder, porque se pierde más de lo que se gana, que a la larga es uno solo. Me gusta ganar siempre y ojalá se diera el título, pero hay que ser consiente que tenemos que ir por objetivos para no desesperarnos.”
Para cerrar habló de su presente en Aguada y de cómo lo tomo la llegada al club en los 100 años y con un gran equipo: “La verdad que me tomo un poco por sorpresa, porque estuve las últimas dos temporadas trabajando en Chile y llegué un martes al país y del club me llamaron el miércoles, no estaba en mis planes. Además, que volver al femenino era un desafía muy grande porque había estado dos temporadas seguidas con los hombres y me había separado un poco del femenino. Pero, me gustó el desafío, me gustó volver y ver como estaba la Liga.”
“No te voy a mentir, al principio fue estresante el cambiar el chip de llamar jugadores chilenos a llamar jugadoras de nuestro medio, para sumar y conformar el plantel, porque la realidad que del plantel que tengo hoy solo dirigí a Chiara Vico y a Cami, pero cuando era chiquitita, empezamos juntos ella como jugadora y yo como entrenador en Bohemios. El resto para mí eran jugadoras nuevas. Ese desafío fue lo que me atrapó y ni que hablar una institución como Aguada, en el año de su centenario y me sorprende lo que es la gente del club, una vez que estás acá adentro en todos lados encontrás un hincha y te transmiten una pasión que nos la han contagiado a todo el equipo.”