San Telmo Rápido Sport con un trío insoportable entre Rodríguez, Piñeiro y Castro derrotó con claridad a Reducto 90 a 65 y sigue prendido en la parte alta de la tabla.

El encuentro comenzó muy parejo, con alternancias en el tanteador y un duelo muy particular en la base de los equipos. Nicolás Comas por el lado de Reducto e Ignacio Castro por el equipo de San Telmo. El juego pasaba por las cortinas y cortes al aro, con dobles cercanos al cesto. Hasta que San Telmo de la mano de Johnny Rodríguez, Ignacio Castro y Andrés Piñeiro comenzó a colocar la bola desde los 6,75, para cerrar de mejor manera los primeros diez e irse arriba 24 a 17.

En el segundo cuarto Reducto pasó a una defensa en zona 2-3 para tratar de cerrarle los caminos al aro al equipo local. Algo que logró, pero no contaba con el enorme juego del poste de San Telmo para generar, comenzó a meter de tres y de la mano de Johnny abrió la zona para dejar los huecos con las caídas al aro de Castro y Piñeiro. Del otro lado Reducto no podía ante la gran defensa del equipo santo y en 8 minutos de juego tan solo tres jugadores lograron anotar, con un 5 de 5 en triples, es que los del manicomio solo la metían de tres. Hasta que apareció Gastón Romero de buen ingreso para romper la sequía con un gol y foul a falta de 1:51 para el cierre. Pero nuevamente dos buenas ofensivas en el local le sirvieron para cerrar mejor e irse arriba 48-37 al término del primer tiempo.

El comienzo del tercer cuarto terminó de liquidar las acciones del juego. Con Piñeiro y Castro como abanderados San Telmo marcó un rápido 9-0 para abrir veinte puntos de ventaja, una diferencia que sería indescontable. El conjunto del manicomio apenas pudo convertir de libres en el comienzo del cuarto, mientras que Castro con dos bombas consecutivas no le daba aire a la visita. El equipo de Cortizas intentó constantemente bajar el porcentaje de tiros de San Telmo, pasando de defensa zonal e individual pero no dando con la tecla, y en ofensiva los porcentajes no eran los mejores, dejando vía libre a las corridas del equipo local que se iba en el marcador. El tercer cuarto se cerró con el marcador a favor de San Telmo de 71 a 51.

El último fue simplemente para cumplir. Los primeros dos minutos de juego fueron de porcentajes bajos y poco acierto, con apenas un doble de Piñeiro en San Telmo. El momento más crítico del juego para los locales fue cuando Ignacio Castro debió salir luego de una doble torcedura de su tobillo derecho que lo marginó del resto del partido. Los minutos finales sirvieron para la rotación de ambos planteles y maquillar un poco el resultado, que terminó siendo de 90 a 65 para el equipo local.

De esta manera San Telmo vuelve al triunfo y queda con un récord de 4-3, mientras que Reducto cosechó su cuarta derrota al hilo, para quedar con récord negativo de 2-5.

LO DESTACADO

Cómo no destacar al trío de locos que tuvo San Telmo. El gran juego del equipo local pasó por la muñeca de estos tres jugadores. Castro el revulsivo, con una energía y agilidad impresionante, que varias veces dejó en el suelo a sus rivales. Piñeiro, con el juego colectivo y constantemente ordenando a sus compañeros, jugando el pick con Rodríguez y atacando el aro cuando quedaba el hueco. Y, qué decir de Johnny, pasan los años, pero la calidad está intacta, el triple como arma de doble filo, para tirar o penetrar y las mañas de un viejo guerrero a la hora de capturar los rebotes. Entre los tres anotaron 59 de los 90 puntos del equipo local, un 65%. Brutal lo de este trio de locos.

UNO x UNO

Castro (8): Energía, garra, calidad. Todo eso a disposición del equipo, además con fintas locas que dejaron varias veces en el piso a sus rivales. Piñieiro (8): De tres letal, de cara al aro letal, asistiendo, también letal. No le faltó hacer nada. Marchelli (5): De los titulares el que menos rindió, le costó la defensa de Trusich. Miller (6): atacó el aro cada vez que vio el hueco, desde la línea simple no perdonó. Rodríguez (8): Que cédula ni que nada. Como el whisky, cuanto más añejo, más calidad. De León (7): Entró para casi no salir más, anuló a Tortajada y dio una mano muy grande con Mujica. Fontes (6): Correcto ingreso. Tolmero (6): Entró cuando debió salir Castro y se adueñó de la base, culpable de estirar las distancias en el final. Núñez, Carbajal, López (-): Minutos con el partido liquidado. Masner (7): Controló la pintura de su rival, no le dejó hacer el juego con Mujica y Tortajada, cuando logró correr la cancha se hizo intratable.

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Comas (4): Nunca pudo hacer su juego, correctamente defendido por Castro. Taboada (3): Sigue sin encontrarse, se ofusca rápido con el arbitraje y se va de partido. Trusich (5): Hoy fue  el mejor, no solo por los puntos, sino que fue el único que se animó a atacar cuando quedaba un hueco libre. Tortajada (3): Lejos de ser su noche, lo superaron en ambos lados de la cancha y casi no miró el aro en todo el juego. Mujica (4): Desconocido nivel, se lo comió Rodríguez, que lo anuló completamente y lo sacó de juego desde el primer cuarto. Acevedo (5): Él único que acompaño a Trusich, intentó, pero poco pudo hacer. Romero (4): Buen ingreso en el ataque, atrás no pudo contener a De León. Silva (5): Desde que tuvo Covid le ha costado recuperar su forma física, la mira desde 6.75, intacta. Ramírez (3): Pasó más en el suelo, Castro lo descaderó con sus fintas, insoportable. Nuñez, Altalef (-): Poco en cancha. Cortizas (4): Lo intentó por todos los medios, defensa individual, luego una zona 2-3, vuelta a la marca personal. Pero los porcentajes de San Telmo estaban intratables.

VAR

Carlos Peralta, Christian Barreiro y Agustín Ortiz (7): De los arbitrajes más correctos del campeonato hasta el momento. Pitaron lo justo y necesario, apenas unas protestas de los jugadores y casi nula de la tribuna, eso marca la conformidad con la terna.

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LO DISTINTO

Se podría titular “Ni me pude sentar”. Es que promediando el tercer cuarto y con la diferencia ya laudada Masner quiso darle descanso a Castro, que venía siendo el jugador con más minutos en cancha y el más destacado del equipo. En su lugar ingresó Carlos Marchelli, pero, antes de poder sentarse, Johnny miró al banco pidiendo aire, eso hizo que el entrenador mirara nuevamente a Castro para que vuelva al juego en lugar de Rodríguez. No pudo ni descansar el número 15 del equipo Santo.