Larre Borges obtuvo una victoria impostergable ante Miramar, 83-71 por la cuarta jornada de El Metro. Demian fue la gran figura de la noche anotando, además de una sensible mejoría en la defensa y actitud del equipo.
Olivera hizo los deberes con el scouting, Miramar se refugió rápidamente en una zona 2-3 que complicó a Larre por su mala puntería exterior forzándolo a pérdidas, permitiendo a los monitos generar puntos fáciles en corrida de cancha, con Ottonello volando para castigar en cancha abierta y darle la primera ventaja a Miramar. El cuadriculado mejoró atrás y con penetraciones consiguió vulnerar la zona, puso un 8-0 tras el minuto de Nieto, aunque un triple sobre la chicharra del “Baldosa”, de excelente primer cuarto dejó las cosas 20-19 al final del mismo.
Aparecieron los triples para Larre que afinó la puntería desde varias manos, importantísimos para crecer en confianza y forzar a la defensa rival a ajustar; mientras Miramar estaba en una sequía total. Hasta que de la mano de Cousté, que se puso el equipo al hombro, la ofensiva del Mono volvió a fluir para ponerse nuevamente en juego e irse al descanso atrás sólo por 37-35.
El aurinegro salió decidido a buscar a Glenn adentro y Ricardo tradujo su ventaja física en puntos que lo pusieron siete arriba. Ottonello volvió a responder, pero le faltó compañía; y luego Demian aprovechó los espacios generados por Glenn para prenderse fuego con 18 en el tercero que lideraron el contundente parcial de 28-16, para que el dueño de casa se vaya al último descanso ganando 65-51.
Los de Olivera intentaron arrimarse, pero Larre Borges ya era otro en defensa. Izarrualde fue fundamental aportando en ese sentido, mientras Demian siguió adueñándose del trámite siendo un problema sin solución para Miramar. Hasta que el dueño de casa empezó a confundir caminos en ataque, la presión toda la cancha monito tuvo su efecto y Miramar se arrimó hasta siete cuando la historia parecía liquidada. Pero cuando el monito logró sembrar algo de duda, volvió a aparecer Demian con una daga de tres que terminó de bajarle la cortina al match, que se quedó en Larre por 83-71.
EL GRITO
¡¡Defendé, defendé!! Eso lo entendés bien en español.
UNO x UNO
García (5): Sin demasiado destaque. Defendió intenso y entendió que el ataque iba por otro lado. Zubiaurre (6): Mejoró mucho. Sobre todo repartiendo juego y defendiendo, debe seguir afinando la puntería. Álvarez (10): Destacadísimo. Pereira (6): Jugó para el equipo. Sin la efectividad en el goleo de otras noches, sumó desde varios otros lados. Glenn (7): Se impuso casi sin esfuerzo en ataque, donde no lo habilitaron mucho. Atrás no estuvo tan atento. Izarrualde (8): Fundamental en defensa para marcar el rumbo de la noche. Acevedo (5): No fue su noche individualmente. Poco le importa. Borrallo (4): No entró bien. Nieto (6): Reaccionó a tiempo. Desde la defensa cimentó el éxito.
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Morena (4): Le costó marcar el ritmo. García Morandi (4): Aportó algo atrás. Cousté (6): Chispazos. Gran momento en el segundo, se apagó. O lo apagaron. Wineglass (5): Aun no convence. Demasiados tiros fallados y poca defensa. Ottonello (8): Titánico esfuerzo del baldosa, le faltó ayuda. Della Mea (5): Entró a defender y no fue gran factor. Nuñez (4): Atrevido y con buena mano para tirar. Le faltó más seguridad con el balón. Tessadri y Zachow (-): Pocos minutos en cancha. Olivera (5): Disimuló las desventajas por momentos. No encontró solución a Demian.
VAR
Alejandro Sánchez Varela, Joaquín Silvera y Franco Dabbisogno (7): Casi sin fallos. Buena noche de la terna.
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LO DESTACADO
Cuesta pensar en otro que Demian para el galardón de hoy. El capitán se mandó un verdadero partidazo, con 30 puntos (18 en el tercero, momento clave del quiebre de la noche). De hecho, en ese cuarto Demian superó a Miramar por 18-16, brutal. Por si fuera poco, clavó la bomba que sentenció el asunto. Prendido fuego.
EL TERMÓMETRO
El termómetro que marcó la temperatura de la noche terminó siendo Cousté en los monitos. Cuando Xavier calentó la mano, Miramar se arrimó. Luego la defensa de Izarrualde fue el factor clave para enfriar una mano en llamas. Le echó hielo.