Diego García, horas después de confirmarse su traspase como nuevo jugador de Peñarol, dialogó con Básquetbol de Primera sobre el nuevo paso en su carrera.

A la hora de hablar de sus sensaciones por ponerse la aurinegra, comentó que “es un gustito personal jugar la primera Liga en Peñarol. La familia está muy contenta y sin duda de que si el viejo estuviera con nosotros también lo estaría”.

Sobre qué hizo después de que terminara su participación la Liga que aún falta por definir, dijo: “Después de que quedamos afuera con Defensor me tomé una semana para limpiar la cabeza y ya después entrené técnica individual dentro de lo posible. Arranqué a entrenar después de esa semana, pude entrenar un día y tuve que cortar una semana por el tema de las medidas por el aumento en los casos de coronavirus. Estuve yendo a plazas de deportes, estuve jugando domas con varios desconocidos en alguna plaza para despuntar el vicio un poco. Ahora ya conseguí una cancha que alquilaba para poder ir a correr y tirar solo, a veces con algún compañero mano a mano y últimamente en una academia con un profe para volver a hacer básquetbol”.

También habló de los futuros entrenamientos que tendría con el club carbonero: “Estamos entrenando de lunes a viernes todas las mañanas, sin oposición, trabajos físicos e ir a tirar en el Palacio Peñarol. Un grupo va a la sala, otro va a la cancha y ahí nos vamos dividiendo. Después iremos viendo cómo sigue”.

Sobre si el plantel al que se suma lo seduce, contestó que: “Sin duda. Es una de las cosas por las que me sumé. Una obviamente por ser Peñarol y también por el plantel. Con Panchi ya jugué y me sentí recontra bien. Cuando está la doble base es un tema de que la agarra uno y la sube y ya te entendés. Son jugadores de muchísima calidad y creo que nos van a potenciar a todos. Somos todos jugadores de básquetbol y entendemos que hay momentos para uno y momentos para otros. Hay espacio para todos y eso será cuestión de los partidos y de irnos entendiendo. No tengo dudas de que va a ser algo muy natural porque son todos jugadores muy inteligentes que les va a ser fácil adaptarse. Creo que vamos a tener un buen año y que lo vamos a poder disfrutar”.

Por último, recordó a su padre, quien fuera hincha de Peñarol: “De chico lo peleaba un poco, le decía que yo era hincha de Welcome y que él era hincha de un cuadro de básquetbol que en ese momento no existía. Mi padre nos hizo a todos de Peñarol en la familia, vivió los dos quinqueños, la final del mundo contra Real Madrid, imagínate. Tengo a toda la familia ahora muy contenta que lo va a poder vivir y eso va a ser un recuerdo que vamos a tener todos”.