Aguardando aún por el retorno del basquetbol fuimos tras la palabra de Carlos Cabezas, quien nos habló de la Liga en Nacional, de su carrera y varias otras cosas.

¿Cómo venís pasando la cuarentena?

La verdad es que cómo casi todo el mundo estoy tratando de estar el mayor tiempo posible en casa, intentando pasarlo lo mejor posible con las posibilidades que tengo en mi apartamento como lo puede ser entrenar en casa, ver series y el estar conectado también con la familia de España. Poquito a poco se va viendo un poco más de luz tanto en mi país como aquí y esperando que poco a poco vaya evolucionando todo.

¿Por qué tomaste la decisión de quedarte y no volver a España?

Toda esta situación ha ido por fases. Primero quería saber cómo iba a quedar el tema de la competición en lo que fueron las primeras semanas y después ha ido viendo también como estaba la situación tanto en Uruguay como en España, donde como se sabe ha sido uno de los focos más importantes. Entonces viendo que aquí tenía las facilidades para mantenerme en lo que es el sistema del equipo y puedo hacer mis ejercicios y rutinas me llevó a no meterme en una cuarentena obligatoria como lo era la de España. Ahora tengo más posibilidades de volver por lo que estamos trabajando en mi vuelta.

Justo una Liga que a Nacional se le corta en el mejor momento ¿no?

El equipo estaba en un momento fenomenal, llegando al punto de hacer un gran baloncesto como fueron los partidos con Malvín, Defensor, Hebraica que el equipo estaba jugando de muy buena manera con todos sin ningún tipo de problemas físicos. A su vez habíamos encontrado a un Morrison en un gran nivel al igual que Hatila además de la inclusión de un gran jugador como lo era Maurice Kemp, un jugador muy interesante y con unos dotes formidables para jugar a esto. Y la verdad es que todo el mundo sabía que estábamos en un buen momento y en la parte más linda del campeonato se tuvo que detener todo por la pandemia.

¿Cómo te sentiste en Nacional?

El comienzo fue duro, tuve que ir conociendo como era el basquetbol uruguayo sumado al tema que tenía en el pie del cual terminé operándome. Es verdad que no había encontrado una regularidad en toda la temporada, quizá no había podido sumar dos partidos buenos de forma consecutiva, podía tener uno bueno pero a ese le seguía uno no tan bueno. También tuve distintos problemas físicos, vino la recuperación de las lesiones y ahí me costó un poco por la edad que tengo y porque no es sencillo volver de una cirugía. Pero también es verdad que en el último mes había encadenado tres o cuatro partidos buenos, que es lo que más estaba buscando, logré encontrar esa regularidad y pude ser el jugador que yo soy sobre todo en los momentos calientes, conseguir esos tiros difíciles que siempre he asumido durante toda mi carrera. Así que creo que antes de que se cortara todo me estaba reencontrando con mi juego.

¿Cómo marcarías vos los puntos más altos de tu carrera?

La verdad es que viene marcada desde pequeño, porque desde joven pude conseguir cosas importantes con mi país cómo lo fue el campeonato mundial junior de Lisboa en el año 1999. Creo que eso fue el momento más importante para toda la generación del año 1980 y a partir de eso al año siguiente se dio el poder debutar con el equipo de toda mi vida que es el Unicaja de Málaga donde hice todas las formativas. Además tuve la suerte de ganar cosas con Unicaja como lo fue la Copa del Rey en 2005 y la liga del 2006. A partir de ahí ha sido una locura porque ha venido todo muy rápido en mi carrera, ya que luego de casi 10 años en el mismo club me fui al Khimki ruso en el 2009 la cual fue una de las decisiones más importantes de mi carrera. Luego de eso pase por otros clubes como Zaragoza y Murcia donde también conseguí cosas importantes para luego venir a Sudamérica. Jugué para Guaros de Lara donde conseguimos una Liga Sudamericana, después tuve experiencias en Argentina y ahora en Uruguay. Pero al día de hoy me siento muy orgulloso que con casi 40 años pueda seguir haciendo lo que más me gusta que es jugar al básquet que es la cosa que más disfruto, es una pasión. Creo que todavía tengo cosas para dar, me gustaría además llevarme algún lindo recuerdo obteniendo algo con Nacional lo cual de momento no se ha podido cumplir.

¿Cómo fue ese Mundial 2006?

Fue una locura porque la verdad es que no éramos la selección favorita, si bien habíamos logrado campeonatos de Europa en años anteriores. Yo creo que era un gran equipo, de los 12 jugadores que llevó Pepo Hernández todos éramos importantes y cada uno conocía su rol en el equipo, siempre teniendo como líderes a La Bomba Navarro y Pau Gasol y detrás estaban los roles muy marcados. Entonces creo que la distancia estando en Japón hizo que fuésemos día a día, paso a paso y cuando nos dimos cuenta estábamos en la final tras una semifinal con Argentina que fue tremenda, porque si el Chapu Nocioni llega a meter ese triple igual no éramos los campeones. Al día de hoy cuando veo ese partido sigo diciendo “menos mal que no entró ese triple”. A su vez yo creo que fue la guinda del pastel para una generación que había conseguido cosas importantísimas desde ese Mundial junior del 99, de ese equipo había 6 o 7 que integramos la selección. Fue un momento inolvidable y algo histórico para España.

¿Cómo se vivió el Mundial de China donde España vuelve a ser campeón?

Estaba aquí en Uruguay compartiéndolo con el equipo. La verdad es que a ese Mundial España no iba como favorito, tenía por delante selecciones como Serbia, Grecia, Francia y Estados Unidos. Yo decía que esto es largo, la selección no arrancó de la mejor manera de hecho tuvo varias irregularidades pero a medida que avanzaban los partidos y se metían dentro del campeonato se quitaron la mochila para conseguir un Mundial, lo cual es sumamente difícil y a diferencia de aquel año 2006 Scariolo no tenía tanto banquillo para rotar por lo que terminó cargando al equipo en 7 jugadores. Me sentí muy contento y orgulloso de que el equipo y jugadores como Rudy Fernández y Marc Gasol, con los cuales compartí ese Mundial 2006, obtuvieran el título.

Desde tu experiencia ¿cómo viste esta Liga Uruguaya?

Veo una Liga un poco rústica, en el sentido que el basquetbol uruguayo y sobre todo la fase que hemos vivido es diferente a todo lo que conozco y he vivido en otros clubes, quizá lo más parecido es Argentina. Pero es un básquet que hay que saber jugarlo, pero a pesar de todo el baloncesto es uno y el buen jugador se debe adaptar a otros países, otros sistemas de juego, a otra competición, otros árbitros, a todo básicamente pero para eso uno necesita su proceso y yo personalmente ya me estaba aclimatando a ello. Pero es una liga interesante, con extranjeros de buen nivel los cuales colaboran mucho con lo que es el espectáculo que siempre viene bien. La verdad es que es una competición bastante difícil donde Aguada y Malvín tienen las mejores plantillas y después veníamos nosotros junto a Defensor para ver si podíamos buscar pelear el título. En sí la liga es interesante y me ha dejado una buena impresión.

¿Qué le falta a la Liga Uruguaya para crecer en cuanto a su nivel?

Va mucho en lo económico, esa es la realidad. La organización de la Liga Endesa, la cual es a mí entender la segunda mejor liga del mundo luego de la NBA por presupuesto, instalaciones, show, organización y más. Pero al final los mejores jugadores terminan siendo fichados por quien más poder económico tiene y después también hay un tema de infraestructuras y espectáculo. Pero bueno poco a poco la liga va creciendo, Rubén Magnano ha estado haciendo un buen trabajo a nivel de selección y luego cada uno de nosotros intentamos aportar nuestro granito de arena para que la Liga Uruguaya crezca.

¿Qué te ha parecido el juego en sí de la LUB?

Quizá un poco donde nota la diferencia es en la lectura del juego y que le falta ser un poco más disciplinado en momentos puntuales. Pero después tienen cosas muy buenas como su garra, las ganas de querer ganar, esas son cosas que tienen todos los jugadores desde que arrancan. Y por suerte me tocó estar con Leo (Zylbersztein) a quien le gusta mirar mucho el basquetbol de Europa por lo que junto a Manu (Romero) intentábamos manejar el equipo, y creo que al principio vimos un Nacional pero con el correr de los meses vimos otro completamente distinto. Porque en el arranque estaban esas situaciones donde el tiro es precipitado, no había extra pass y todas esas cosas se fueron dando con el correr de los meses para mejorar y llegar a jugar un muy buen baloncesto.

¿Cómo fue la relación con Leo Zylbersztein?

Con mucho respeto, hemos hablado en varios momentos de la temporada la cual no ha sido fácil porque era su primer año con este equipo y se tenía que ir adaptando. Nacional es un club que exige mucho, y a principio de temporada quizá se esperaba mucho por todo lo que había sido mi fichaje y todo lo que podía repercutir en el club y los hinchas, los cuales vale destacar que se han portado con mucho cariño hacía a mi incluso en los momentos más complicados, es de admirar la hinchada del Bolso. Pero volviendo a Leo la relación siempre fue con mucha comunicación y mucha honestidad, siempre he intentado ser muy transparente con él como él también lo fue conmigo. Hubo momentos difíciles como siempre pasa, pero lo importante es que estábamos llevando una línea muy positiva para todo el equipo y para el club que es lo más importante.

¿Qué se viene en el futuro de Carlos Cabezas?

El retiro de momento en mi cabeza no se ha pasado. Tengo buenas sensaciones y luego de la cirugía en el pie me encuentro sano y bien de cabeza. Entonces bueno al día de hoy tengo un adjunto contractual con Nacional y ya después con mi representante tendremos que valorar todo, ver que decide Nacional pero ya te digo que hablar ahora con toda la incertidumbre que hay está de más. Pero sí yo quiero seguir luchando, acabar en setiembre esta temporada si es que se puede y luego veremos.