Malvín sigue sacando a la luz la buena producción de sus formativas y el perimetro fue claro ejemplo de eso. Hablamos con Ailen Sosa y Agustina Aceredo tras la consagración Playera, las chicas que desde la base, impusieron intensidad y fueron claves en el título.
Agustina Aceredo
Por Federico Klein
Estas fueron las primeras sensaciones de la joven jugadoras tras obtener el título: “Trabajamos todo el año para poder conseguir el campeonato. Por suerte en este partido se nos dio, ajustamos los errores de la final pasada y logramos llevarnos la copa.”
Agustina es una jugadora que de a poco se fue ganando su lugar en el equipo en base a muy buenas actuaciones. Acerca de eso la playera nos dijo lo siguiente: “Tenía que aprovechar cada vez que entraba. Sé muy bien que es muy importante ir de atrás hacia adelante, darle mucha intensidad en defensa para generarme confianza para después soltarme y demostrar en ataque. Además tengo la confianza de todas mis compañeras y eso te da una tranquilidad extra.”
Además habló de que se siente jugar con Florencia Somma y Sabina Bello, dos grandes del basquetbol femenino: “Ellas son tremendas jugadoras, no lo voy a descubrir yo ahora. Pero son nuestras líderes tanto dentro como fuera de la cancha. Siempre están dispuestas a ayudarte, ya sea basquetbolisticamente como en otros aspectos. Sin ellas esto sería imposible.”
Metiendose en esta tercera final puntualmente nos habló de la bomba que puso ni bien piso la cancha: “Serdio me dice que si me dejan la oportunidad no dude en tirar y eso fue lo que hice. Por suerte entró y pude ayudar a mi equipo.”
De a poco Aceredo demostró que tiene un techo muy alto, y nos aseguró que seguirá trabajando en mejorar: “Este campeonato ya terminó. Ahora hay que pensar en seguir mejorando tanto colectiva como individualmente, trabajar en mis falencias y fortalecer mis virtudes.”
Ailen Sosa
Por Alvin Montes de Oca
La jugadora comenzó analizando la clave para derrotar al fusionado: “Defensor fue un rival muy difícil. Al principio estábamos muy presionadas, pero pudimos sacar la ventaja leyendo bien los espacios libres, y defendiendo duro”.
La número 22 dejó en claro que merecían ganar el campeonato, pero también aceptó que no fue un tiempo fácil: “El año fue complicado. Veníamos teniendo un cambio generacional, se habían ido Florencia y Caro (Fernández), y estábamos esperando a una extranjera que terminamos cambiando. Todas esas cosas hicieron muy cuesta arriba la temporada, pero por suerte pudimos ganar”.
En dicho recambio generacional, Florencia Somma y Sabina Bello fueron la experiencia en las de la Avenida Legrand. Ailen expresó sus sentimientos en cuanto a tenerlas de compañeras: “Son mis referentes, me ayudan todo el tiempo, dentro y fuera de la cancha. Es genial jugar con ellas, siempre están corrigiéndome”.
Sobre el presente y futuro en el club, afirmó: “Me da mucha alegría permanecer acá. Es indescriptible todo lo que he vivido acá. Soy de Mercedes y desde que llegué a Malvín, me sentí muy cómoda. Este es un grupo muy unido. Voy a seguir jugando en el playero, y espero seguir creciendo acá”.
La mercedaria habló de esa diferencia entre jugar en su ciudad natal, y la actualidad: “Fue un cambio muy grande, de jugar con varones, y entrenar tres veces por semana, a hacerlo todos los días, con mujeres, y trabajando muy bien la parte física. También pasé de vivir con mi familia, a tener que independizarme”.
Algunos de sus parientes más cercanos, que la vieron partir hacia la capital, fueron al Canil, a verla salir campeón, y otros, la siguieron desde la lejanía. Sobre esto, Ailen expresó: “Mis padres y hermano vinieron. Todo esto es muy emocionante para ellos y para mí. Hicieron tremendo esfuerzo para estar en todas las finales, y yo sé que esto que estoy viviendo, ellos lo disfrutan. Yo, contenta de estar jugando, y que me estén viendo”.
Con toda la gente que las acompañó en mente, al finalizar, sentenció: “Quiero agradecerles por venir, e invitarles a que sigan arrimándose. Si tienen hijas, llévenlas a los clubes. Es muy lindo lo que estamos viviendo”.