Olivol Mundial venció 46-43 a Aguada y de esta forma se quedó con el tercer puesto de la Copa Plata.
En la noche de superclásico copero, no llegamos a la Boca, pero si a la Bombonerita, para un encuentro de igual magnitud. Por una parte, el local, en busca del triunfo que le asegurara el tercer puesto, arrancó con Mayra Gómez, Nadia Cigliuti, Rocío Mott, Camila Palomeque y Jimena Calderon. Mientras que la visita, por forzar el tercer juego, saltó al rectángulo con Victoria Alvez, Analía Martínez, Rocío Rovetz, Romina Bello y Daniela Larrosa.
Ambos conjuntos comenzaron enemistados con el gol, y la pelota, y esto lo dejó en claro el tanteador, que en seis minutos de juego marcaba 2-0 para el local. Las aguateras tomaron la iniciativa, pero sin alguna idea clara. De todas formas, les sirvió para terminar el primer cuarto con un pobre 8-4 a favor. Las cosas mejoraron para los segundos diez minutos. El ingreso de Micaela Martínez pareció darle al rojiverde el envión que necesitaba, pero quedó en eso. Una defensa extendida y buenos minutos de Fiorella Garbarino dejaron el juego en tablas nuevamente. A partir de allí, los técnicos buscaron levantar la producción mediante la rotación del plantel, y funcionó. Intercambiando puntos se fueron al vestuario con las anfitrionas al frente por mínima, 19-18. Para el complemento, las de Millán y Sitio Grande marcaron el ritmo, haciendo jugar a sus rivales incómodas, lo que llevó a pérdidas y posteriores corridas de cancha para abrir la máxima de siete unidades, promediando el tercer chico. Las de la Avenida San Martín, que no le encontraban la vuelta en ataque, volvieron a centrarse en la defensa, y de esta forma comenzaron una remontada que les permitió terminar el cuarto tan sólo dos puntos abajo, 37-35.
El cierre fue definitivamente para las locales, que pese al asedio aguatero en cada salida, lograron sacar ventaja desde la línea de libres, y de esta forma lograr una deseada victoria por 46-43, y merecido tercer puesto. La medalla no sólo representa lo que Olivol hizo a nivel femenino mayor, sino también lo que viene haciendo desde abajo, con las más chiquitas, preocupándose por el crecimiento de este hermoso deporte, en las chicas.
EL PODIO
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Más allá de la derrota, Aguada también debe estar en el podio. Porque trascendiendo resultados, han demostrado progreso, yendo de menos a más en el torneo. Lucharon cada pelota, mostraron pasión por este juego que tantos amamos, y siempre lo dejaron todo.
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Este lugar queda, sin duda alguna, reservado para el banco de ambos elencos, que cuando el nivel de juego era bajo, respondieron, anotando 52 de los 89 puntos del cotejo.
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Siempre son los que se llevan las quejas, y a veces insultos, pero en esta ocasión la dupla arbitral, conformada por Julio Dutra y Valentina Benítez merece un reconocimiento. No solo por cumplir su labor de gran manera, sino también por ocupar el lugar de formadores, por momentos, ayudando a las chicas a entender los errores, y progresar.
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