FIBA premió el quinteto ideal y el MVP del Mundial 2019, en una elección que, como suele suceder, dejó abiertas algunas polémicas.

El jugador más valioso del torneo fue el base campeón, Ricky Rubio. El español promedió 16.4 puntos, 6 asistencias y 4.6 rebotes por partido y se hizo merecedor de la distinción individual más importante del torneo.

Los escoltas del equipo fueron Evan Fournier y Bogdan Bogdanovic. El francés finalizó con 19.8 unidades a las que sumó 3.8 rebotes y 3 asistencias, al tiempo que el serbio tuvo 22.9 puntos, 4.4 asistenicas y 4.1 rebotes por juego.

En el juego interior quedaron Luis Scola y Marc Gasol. Luifa se hizo acreedor a su lugar con un enorme torneo que lo llevó a promediar 17.9 puntos, 8.1 rebotes y 1.8 asistencias, a pesar del trago amargo en la final. Por su parte el español fue clave en los suyos para obtener el título aportando 16.4 puntos, 6 asistencias y 4.6 rebotes.

La ausencia de Facundo Campazzo es sin dudas llamativa y quizá allí esté lo más polémico de la elección en donde, claramente, el resultado de la final tuvo una incidencia absoluta.