Welcome logró un triunfo bárbaro de visita ante Urunday y estiró la definición, conservando esperanzas de, al menos, forzar un desempate.

Resumen del partido

En el arranque el juego fue del local. Con un goleo repartido y quebrando fácil la defensa welcomense, Urunday sacó su máxima ventaja en este período. Fueron 14 puntos que hacían pensar que el juego se definiría fácil. Sin embargo, los de Yaquinta comenzaron a mostrar otra cara en el cierre, poniendo un buen parcial con bomba de Frye de la mitad de la cancha incluida. 29-21 y habemus partido. El segundo fue el de la confirmación. Un ingreso bárbaro de Charquero para sumarse a lo que hacía Varela le permitieron a los de Frugoni cambiar el juego y ponerse a dos puntos. A pesar de continuar con buenos rendimientos de Taboada y lo que hizo Brown, el buen ajuste que hizo Yaquinta en la zona interna, no le permitió a Urunday tomar rebotes fáciles y correr. Sólo dos puntos de ventaja en el descanso largo para el local y un partido que seguía prometiendo.

En el tercero definitivamente el partido cambió. Welcome desde Charquero y un excepcional Varela puso un parcial bárbaro y Urunday sintió el bajo período de Emilio. Los ingresos desde el banco no dieron resultados y cada jugador que entraba en la visita cumplía. El Charco la quemó en los dos tableros y la cédula no fue reflejo del enorme rendimiento que mostró. Se hizo incontenible en todos los aspectos del juego y provocó que su equipo se vaya arriba por primera vez 66-63 arriba de cara al último chico. El período final tuvo de todo. El local llegó a pasar nuevamente, pero la cabeza de Welcome estaba fuertísima. Siempre desde los mismos protagonistas, y con Wadell luchándo cada ofensiva, los de Yaquinta abrieron hasta nueve de ventaja. Sin embargo, Urunday no quería regalar el punto tan fácil. Taboada mostrando su clase y Brown como acompañante de lujo, provocaron que el estudioso se ponga a un punto con 59 segundos para el cierre. Pero la noche lluviosa tenía grabado el nombre de todo Welcome y el destino final era alargar la esperanza de forzar un desempate para quedarse en LUB. Cerrando sin Varela por faltas personales, pero con Charquero y De Gouveia siendo precisos desde la línea, la W cerró un juego increíble que terminó ganando 91-89.

UNO x UNO

URUNDAY UNIVERSITARIO

Zubiaurre (3): De sus partidos más flojos. Su equipo lo extrañó. Taboada (7): Que hombre. Partidazo. Le faltó la victoria. Brown (7): Como en sus mejores épocas en Larre. Indefendible, atrás dio licencias. Lee (6): Siempre cumple. Erró libres claves. Crawford (4): Totalmente superado por Charquero. Se va a despertar con la cama mojada por soñar con tantos charquitos. Romero (6): Cumplió. Medina (5): Lejos de su habitual nivel, no fue solución desde el banco. Pomoli (5): Pocos minutos. Es un jugador menos cuando el equipo ataca, no mira el aro. Da Prá (6): Acortó muchísimo la rotación pero no le dio resultado. En el final protestó como pocas veces se lo ha visto.

WELCOME

De Gouveia (6): Estuvo muy impreciso desde la línea de 6,75, sin embargo se las ingenió para ser muy importante. Varela (8): El hombre de la reacción. Contagió a se equipo. Se fue por quinta como nos tiene acostumbrados, dejando la vida. Frye (5): Ni fu ni fa. Un triple sobre la bocina en el primer cuarto y poquito más. Richardson (2): No hizo nada. Wadell (7): Gran juego. Encontró los compañeros que muchas veces le faltaron en otros partidos. Trelles (5): Pocas veces entra tan impreciso. Modernell (6): Un trabajo enorme en defensa. En ataque arrimó algún punto importante, sobre todo, desde la línea de libres. Charquero (10): El destacado. Yaquinta (7): No se casó con los de cédula extranjera. Supo quienes iban a dejar la vida por estirar la esperanza y lo manejó de la mejor forma.

_______________________

Lo destacado

Claudio Charquero. Su cédula dice que lleva vividos 41 veranos. Su juego de hoy deja la sensación que tiene algún tipo de pacto con el diablo, o que visitó la fuente de la eterna juventud. El bueno de Claudio se volvió totalmente imparable, no sólo en la pintura, sino que cuando se abrió, lastimó. Ademas, cuando fue a la línea, lo hizo de forma precisa. 20 puntos y 17 rebotes son estadísticas dignas de un extranjero, el crack de Charco lo hizo en un juego donde su equipo no tenía mañana. Fundamental para seguir con vida en LUB. Claudio, tenés cuerda para rato.

Lo distinto

Sin temor a exgerar, en el gimnasio de Urunday habían aproximadamente 65º celsius. Sin embargo, Nick Wadell encontró el lugar preciso para pasar el rato mientras se daba uno de los tantos cortes que tuvo el partido. Se fue al lado del ventilador gigante y ahí se quedó recibiendo aire fresco. Eso sí, parece que el ventilador muy bien no andaba, porque la mano le siguió hirviendo toda la noche y lo convirtió en una de las figuras del partido.