El turno en la ronda de entrenadores de la Liga Uruguaya le llegó a Defensor Sporting, y Álvaro Ponce nos contó cómo viene la preparación del equipo fusionado.

A diferencia de otros equipos que recién se están terminando de armar, ya hace un buen tiempo que entrenás con el plantel casi completo, ¿Pensás que puede ser una ventaja de arranque?

Siempre es bueno empezar a trabajar antes, pero hay que tener en cuenta que este es un equipo completamente nuevo, de los doce del año pasado hay ocho que son nuevos, no queda otra que empezar antes. Los extranjeros vinieron el 1º de Setiembre, pero después sufrimos las bajas de Iglesias por selección y los Sub-23 que a veces no podían entrenar, así que completo del todo no, pero sí venimos trabajando hace un tiempo.

¿Cómo vienen las prácticas? Muchos jugadores nuevos, ¿Cómo ves al plantel?

Es un plantel que comparte la característica que le encanta entrenar, entrenan muy fuerte,  nunca tienen una queja al respecto y eso es muy positivo, mucho más en un equipo nuevo. Hay muy buen relacionamiento, siempre dándose para adelante y si hay que jugar duro en una práctica entienden que es para el beneficio de ellos, en ese sentido estamos muy conformes con la ética de trabajo, incluso los extranjeros están en esa línea, cuando ven que el grueso del equipo entrena fuerte ellos se acoplan.

Obviamente es muy temprano, pero ¿Cuál es el objetivo a priori de Defensor Sporting?

Sacar el máximo jugo del plantel disponible, ese es el objetivo. No tiene sentido fijarse llegar hasta tal fase o puesto porque hay muchos imponderables a lo largo de un campeonato, lo que no puede negociarse es que el equipo dé el máximo en sus posibilidades, si logramos eso Defensor puede ser una sorpresa.

¿Qué me podés decir de los extranjeros? Ya los ves hace varios días, Johnson ya es conocido en el medio, no así Sanders y Henry…

Sanders y Henry están sin jugar hace tiempo. No así Johnson, que en Agosto jugó semifinales de la liga dominicana y se nota que está con más trajín. La actitud es impecable de los tres, son buenos compañeros, respetuosos y entrenan a la par del resto en actitud y ganas. Henry es un base armador, que se preocupa por asistir y que el equipo juegue antes que su propio gol. Un jugador de equipo y con aspectos de liderazgo positivo. Sanders es un “3” grande, atlético a pesar de sus 33 años que lo hacen el mayor del plantel. No es el tipo más espectacularmente atlético pero entiende muy bien el juego, tiene gol por varias vías y creo que nos va a sumar mucho. Y bueno, Johnson conocemos su poderío, estamos trabajando para que llegue lo mejor posible físicamente.

Hablando un poco de extranjeros, ¿Qué te parece este cambio en la reglamentación ahora con tres extranjeros? ¿Estás de acuerdo?

Sí, estoy completamente de acuerdo porque en todas las ligas del mundo te diría que tres es el mínimo. Todo se potencia con más extranjeros, entre otras cosas porque esto es un espectáculo y hay que brindar el mejor posible. En España por ejemplo, hay equipos que tienen diez extranjeros  de los doce y España es potencia a nivel de selecciones. Eleva el nivel de exigencia de los jugadores nacionales que tienen que esforzarse más, es positivo para ellos, para el desarrollo del básquet y para el espectáculo ni hablar. Además hay un montón de jugadores uruguayos que se están yendo al exterior, y es entendible porque ganan más y las ligas son mejores, si no suplís eso con la llegada de extranjeros la liga se empobrece en todo punto de vista.

¿Te parece que esa competencia eleva el nivel de juego y a la larga favorece el desarrollo de los nacionales?

Es así, como en todo orden de la vida. Si estás en un medio que no te exige te achanchás, no tenés motivación para crecer porque con muy poco te da.

Varias piezas se cambiaron para esta temporada y vinieron varias fichas que si bien tienen experiencia son jugadores jóvenes. ¿Intentarán correr bastante la cancha, defender intenso, o qué característica estás intentando imprimirle al equipo?

Sí. La idea es tener un equipo lo más dinámico, que se pueda para correr la cancha, que no es ningún misterio, es a lo que se juega hoy en todo el mundo; defender fuerte, correr y si no, tener mucha movilidad, no aplastar el juego.

También se incorporaron dos Sub-23 interesantes como Da Costa y Ottonello, ¿Qué rol esperás que cumplan?

Estamos muy satisfechos con los dos. Ambos tienen 20 años, o sea que tienen dos ligas más como Sub-23. Ottonello llegó primero, muy entregado al trabajo, está mejorando física y basquetbolísticamente, en estos dos meses fue muy notorio. En los amistosos dio una mano bárbara con las ausencias que tuvimos y la verdad que estamos muy contentos con él. A Da Costa ya lo conocía de procesos de selección, tiene unas condiciones técnicas y físicas que son muy buenas y por supuesto, hay que pulirlo. La idea es que contribuyan, que le brinden energía y calidad a los entrenamientos y que den una mano en los partidos, que se vayan ganando sus minutos.

Es tu segunda temporada al frente de un equipo históricamente y actualmente acostumbrado a las instancias decisivas, ¿Se siente presión por llegar lejos?

Todos los entrenadores tenemos presión en el básquet uruguayo. Cualquier equipo hace un esfuerzo muy grande y quieren verlo reflejado en resultados. El año pasado más allá de algunos problemas de conformación que tuvimos estuvimos definiendo igual, le hicimos mucha fuerza a Malvín no sólo ganando un juego sino que dos de los que perdimos tuvimos la última bola para ganar y no se dio. Fue muy parejo pero nos quedamos con ganas, porque vimos que podíamos a pesar de no tener el poderío económico que otros equipos tenían y hoy tienen. Estuvimos muy cerca de sacar al campeón. Trabajando fuerte, con humildad y conociendo nuestras limitaciones creo que podemos volver a dar pelea y como marca la historia del club estar en las primeras posiciones.

Por más que aún falta mucho, ¿Quiénes pintan como candidatos?

Económicamente Aguada, Malvín y Nacional están despegados del resto. Por lógica, Malvín por ser campeón y repetir gran parte del equipo y continuar el proceso de trabajo, eso te da un plus muy grande. Aguada hizo una inversión enorme trayendo un jugador que no es de esta Liga como Davis y mantiene la base de jugadores y cuerpo técnico que llega de dos finales consecutivas. El otro es Nacional, en Uruguay cualquier equipo con Batista es candidato de por sí, si además el equipo el año pasado llegó a semifinales todo cierra para que estén de nuevo definiendo.