¡Qué lindo que es soñar!

Partido clave en el futuro celeste pensando en la clasificación al Mundial, y el marco de un Palacio Peñarol cálido y con apoyo para el equipo. Un primer cuarto de mucho nervio encontró la ventaja uruguaya en el posteo de Batista, al tiempo que los mexicanos tuvieron tanto en Ayón como en las descargas a tiros exteriores las vías de gol para irse al primer descanso 19-9 arriba. Un par de bombas de Cruz y Martínez para la visita hicieron cuesta arriba el segundo cuarto, pero jugando con dos pívots Uruguay se acomodó mejor y aparecieron puntos de larga distancia de Fitipaldo y Joaquín Rodríguez para reaccionar. El reingreso de Parodi aumentó la intensidad defensiva celeste y con triple del sanducero llegamos a estar a tres, pero “Paco” Cruz castigó con el mismo recurso para dejar a México 35-29 de cara al descanso largo.

Un mal reinicio obligó a Signorelli a pedir tiempo temprano, y la salida de Batista con cuatro faltas hizo que volvieran Kiril y Hatila en una tabla que volvió a funcionar bien, junto a Parodi que se destacó generando y anotando, en un equipo que fue sólido atrás pero extrañó el gol exterior de “Fiti”. Ayón tuvo chispazos en la visita, que se fue 47-42 al período final. El duelo entre Batista y el madridista fue el centro del juego, con ventaja para ambos ataques, pero cuando el uruguayo se puso firme atrás logramos pasar al frente faltando dos minutos, con acciones notables de Wachsmann en defensa y ataque. Mexico logró dos dobles para pasar por mínima faltando una vuelta del reloj, pero otra ves Esteban sacó ventaja de espaldas para pasar en el score. Una gran defensa celeste, más libres de Kiril y Fitipaldo pusieron cifras finales 63-60 al triunfo celeste, y estamos más vivos que nunca y soñando con China 2019.