Gran triunfo de Miramar 97-84 sobre Unión Atlética en cancha de Larre Borges, y con los resultados de esta noche quedó a dos puntos de la cima de la tabla, cuando restan dos partidos de la liguilla.
Resumen del partido
El gimnasio Romeo Schinca que se fue poblando con el encuentro comenzado fue el que albergó a las 300 personas aproximadamente que le ganaron la pulseada a la inhóspita jornada y querían comenzar la nostalgia mirando básquetbol.
Naranja al cielo en La Unión y comenzó mejor Unión Atlética con la clave del 1-2, Salvador Zanotta, Gastón Semiglia que anotaban desde afuera, no llegaba a contestar los tiros Miramar y le costaba caro. Irresoluto en ataque, que provocó minuto de tiempo por intermedio de Esteban Yaquinta. Reacomodó al equipo, y con la elegancia de Damián Blazina para jugar, Faronte Drakeford haciendo pesar sus centímetros y Maximiliano Botta corriendo la cancha es que pasaron los “Monitos” (21-17) con parcial de 12-2 en ese lapso del primer cuarto.
En el segundo chico, un solo equipo en la cancha, jugando posesiones largas, sin egoísmo, y teniendo claro sus limitaciones, ese era el conjunto de Yaquinta. Sacó 16 puntos de renta, con gran labor de Drakeford en la pintura, culminando las buenas asistencias que le llegaban. La UA era Gastón Semiglia dependiente, se puso el cuadro al hombro en tres ataques seguidos para irse tan sólo 10 unidades abajo al descanso largo, ya que en el juego la distancia era abismal, 48-38 el que ofició de local en Larre.
Tras el descanso largo, el del barrio Belgrano siguió siendo regular, pero no podía defender a Semiglia, en zona, cuadrado 1 o al hombre. Estaba tremendo el capitán de la calle Velsen, que contó con una tímida ayuda de Facundo Grolla que apareció jugando de espaldas, siendo interesante para que su equipo se ponga a un doble, para los últimos 10 minutos. Miramar confundido en ataque, Botta sostuvo al local con un par de bombazos para contrarrestar la reacción del rival.
El final se presumía cerrado, pero pasó todo lo contrario. Una ráfaga de básquetbol de Miramar puso un 14-0 contundente para abrir nuevamente 16 unidades de diferencia (78-62) a falta de 7:10. El azulgrana, no podía anotar por intermedio de Semiglia, algo de Sebastián González Larrea con gol y foul insinuaron una reacción que nunca se llegó a confirmar. Lo cerró un par de minutos antes el equipo de Gadea y Alicante, para claudicar un punto clave en el campeonato, quedó a dos puntos de los de arriba y en noche de nostalgia, que le quiten lo bailado…
UNO x UNO
MIRAMAR
Wohlwend (4): Subió la pelota correctamente, le faltó “Punch”. Blazina (9): Exuberante, Impresionante, gigante, enorme, la dejamos acá, parecemos un comentarista de fútbol. Cervi (5): Irregular. Botta (7): Clave en defensa, pero sostén en la reacción de la UA. Drakeford (7): Arrancó tímido, terminó con confianza. Viotti (6): Ingresó con muy buen “Tino”. Olivera (4): Alternó en el bajo. Yaquinta (7): Sin mucha rotación, eligió a Viotti que le respondió para conducir al equipo. Gran estrategia para incomodar a Semiglia en el último chico.
UNIÓN ATLÉTICA
Zanotta (5): Prolijo con bola en mano, no pudo meterse de lleno en el partido. Semiglia (7): Haciendo alusión a un boliche “El solitario Gastón”, sólo bancó. Alonso (3): Descalificado y desapercibido antes. González Larrea (4): Debió pesar más en la pintura. Beaty (2): Egoísta, mal partido, no es un extranjero para ascender. Grolla (6): Buenos minutos en el poste bajo, incomodó al rival. González (3): No cambió su ingreso. Trusich (-): Pocos minutos. Frydman (3): Su equipo no tuvo una línea de juego, corrió y tiró. Tampoco le respondieron algunos jugadores y le faltó Medina. Renunció post partido.
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Lo destacado
No hay que ser muy idóneo en la materia, para decir que Damián Blazina la quemó en cancha de Larre, menos mal que estaban los bomberos cerca, aunque llovió bastante. Pero hay que destacar al equipo, cada uno en lo suyo, con el número “1” letal en el juego ofensivo, Drakeford, Botta, Viotti, algo de Cervi y quizás en el debe Wohlwend que no tuvo una buena jornada, pero Miramar fue un equipo y se notó ámpliamente en la cancha.
Lo distinto
Estuvo bravo, pero nos ponemos pícaros. Queremos promocionar los pantalones abotonados de Diego Olivera, en un “tirón” ya queda listo y sin nada, no hay que andar bajándoselo como la mayoría que están en el banco esperando su oportunidad, con estás noches muy frías. Así, que ya saben, si quieren agilidad para alguna noche íntima, y no andar complicándose con los cierres, botones, cintos, elásticos. Los pantalones que usa el capitán de Miramar son los ideales, un tironcito y después que continúe la fiesta…
