25 de Agosto se quedó con un puntazo en su gimnasio ante Verdirrojo tras derrotarlo 78-72 en su gimnasio.
El partido se inició con 5:42 para terminar el segundo cuarto y con el equipo del Cerro arriba25-23. Sin embargo los dirigidos por Ramiro Caballero salieron desconcentrados, no buscaron el gol claro y así fue como estuvieron tres minutos sin convertir. El local aprovechó, con triple de Verrone pasó, pero de la mano de Kevin Nelson y Monteverde Verdirrojo se fue arriba 30-28.
El descanso largo fue de cinco minutos, a la vuelta del mismo con Modernell como emblema los de la calle Prusia pusieron un 5-0, pero el León se acordó de Dobbins quien ganó en el uno por uno, asistió y mejoró, también logró ajustar en defensa ya que el propio Justin y Verrone estuvieron atentos a las ayudas, cerraron el aro –show de tapas-, corrieron la cancha y en un abrir y cerrar de ojos colocaron un 11-2 (47-44) para pasar con un Cococho activo en ataque y Lipatin participativo –gran gol sobre la chicharra- para encarar los últimos diez 49-46.
El último cuarto se abrió con doble de Rivero para darle cinco de renta a los suyos pero los del Cerro siguieron en juego gracias a un triple y falta de Borteiro para achicar (53-52). Los de Villa Dolores respondieron también con un bombazo de Barses para darle renta cuatro, esto motivó a que Caballero pidiera minuto. Al retorno del mismo la visita salió más intensa, nuevamente Monteverde y Nelson fueron las claves y así tomaron las riendas del marcador 60-56 (aprovechó técnico a Dobbins). Quien se acercó a la mesa para calmar las aguas fue Espíndola. El León salió con todo, triple y doble de Cococho sumado a un gol de Dobbins que les dio cuatro de ventaja (69-65) con tres minutos por jugar. Verdirrojo intentó con Modernell y lanzamientos libres pero dos triples (Rivero sobre la chicarra y Álvarez) le dieron cinco de ventaja nuevamente al local, 75-70 cuando quedaba 1:30. Los de la calle Bado a base de libres en las manos de Verrone sentenciaron el partido con cifras finales de 78-72.
Puntazo de 25 de Agosto, el tercero al hilo que le permite seguir soñando en zafar o acomodarse lo mejor posible en los cuatro últimos.