Malvín se coronó campeón por la Copa de Oro del Torneo Nacional Sub 23, tras derrotar a Trouville 79 – 74 en la final y pudo así colgarse las medallas tras su segundo puesto el campeonato anterior.
El rojo de Pocitos comenzó con el pie derecho, de la mano de Manuel Mayora y Juan Ducasse lastimando desde el perímetro. Por el lado playero, el goleo fue más repartido pero a su vez escaso en comparación con los porcentajes de su rival. Hernando Cáceres fue clave en los últimos minutos de este período, jugando adentro, sacando faltas que redituó desde la línea y poniendo un triple, para cerrar 23-14 a favor de su equipo.
Rápido parcial (9-0) de Malvín para empardar el compromiso con el importante ingreso de Santiago Pereira siendo fundamental en ataque con su tiro exterior. En este pasaje se vio un gran trabajo defensivo apelando a una zona que impidió que Trouville siga pesando en la pintura. De todas formas, Augusto Pons sacó a Manuel Monteverde para colocar otro externo y de esta manera volver a ser gravitantes desde los 6.75. Lo planeado resultó, y le permitió culminar 45-32 de cara al descanso largo.
Fue otro el andar de los de Av. Legrand en el complemento. Emiliano Serres entró muy enchufado anotando 11 unidades en este tercer cuarto y mostrando cosas interesantes a la hora de defender. El elenco de Pocitos ya no era tan claro en su juego y dependía bastante de lo que podía hacer Cáceres para no perder la ventaja en el tanteador, que a pesar de haber disminuido, era considerable para entrar al periodo final 59-52.
Ese esboce de remontada que los dirigidos por Horacio Martínez, se concretó finalmente en el último chico. Aparecieron las bombas de tres puntos de la mano de Juan Santiso, que colocó tres en este cuarto, y Timothy Wendel para darle un cierre apasionante a esta final. Fausto Pomoli no había sido muy participativo en el ataque playero pero al final respondió correctamente en ambos costados de la cancha. Mayora y Monteverde mantuvieron a su equipo para que el desenlace sea de alto voltaje. Emiliano Serrés fue quién con un triple a falta de ocho segundos se convirtió en el héroe de la noche, y tras una perdida de Martín Mayora, Santiso sentenció con dos libres la victoria final que le permitió a estos pibes levantar la copa.