Uniceub le ganó a Malvin por cifras de 77-75 y de esta manera abrochó el pasaje a la final de la Liga Sudamericana una fecha antes.
El encuentro se abrió viento en popa para los brasileños, que de la mano de Guilherme Giovannoni pusieron un 8-0. Los dirigidos por José Carlos Vidal estuvieron muchos más finos, Fúlvio asistió en el poste a Ronald Reis que lastimó. El playero no pudo imprimir la buena defensa realizada en el cotejo anterior y eso lo sintió, en ataque Mazzarino no gravitó mientras lo mejor se vio en Mathias Calfani. La experiencia de Giovannoni fue clave para sacar 10, (16-6). Esto motivó a que Pablo López pidiera su primer tiempo para ordenar el cauce del equipo y vaya si lo hizo, a la vuelta del mismo colocó un 8-0 con Winston como figura para achicar a un doble (16-14). Guilherme siguió picante en ataque castigando de tres y dos, la visita lo cerró mejor, 25-21 arriba.
Para arranque del segundo cuarto ambos equipos bajaron su rendimiento en ofensiva, es que las defensas estuvieron mucho más sólidas que en el chico anterior. Winston defendió con éxito a Guilherme, mientras que Uniceub se paró en zona, y más allá de un triple de Fernando Martínez los de la Avenida Legrand no estuvieron cómodos. Esa defensa zonal le permitió a los norteños salir en alta velocidad y seguir dominando el partido con Giovannoni, Deryk Evandro y Lucas Cipollini como figuras para abrir 15 de renta (44-29). El primer tiempo se cerró con una bandeja prácticamente que sobre la chicharra de Winston para que los suyos se vayan 13 abajo, 48-35.
El descanso largo no cambió mucho la cabeza playera, la clave en defensa, esa que tanto pregona López no la pudieron plasmar en el rectángulo de juego, tanto es así que con un rápido 4-0 los norteños abrieron la máxima de 17 (52-35). Lo que motivó en forma más que rápida a que su entrenador pida tiempo nuevamente. A la vuelta del mismo Malvin puso un 5-0 para achicar, pero esa levantada se vio opacada por la cuarta de Hoskin, que fue superado por Reis con claridad. Uniceub también tuvo a un jugador afectado por faltas, Henrique Da Cruz, quien se fue al banco por tener cuatro. Los brasileros se cargaron rápidamente y Malvin desde la línea de libres no falló, con el aliento de la gente, más buenas defensas que provocaron pérdidas de balón de su rival achicaron a siete (59-52). El cierre del chico se dio gol por gol Cipollini para los de Brasilia mientras que Winston tomó las ofensivas para sí con éxito para descontar a cinco, 64-59.
Los diez minutos finales se abrieron con dos puntos de Calfani que levantó a toda la barriada sin fin, pero Mathias cometió su cuarta cuando aún quedaba 8:30 por lo que López decidió mandarlo al banco. Uniceub hizo un juego inteligente, ofensivas largas, Fúlvio y Deryk pincharon el balón y como si fuera poco Reis dominó la pintura y ganaba rebotes en ofensiva, pero pese a eso Malvin estaba a tres (66-63). Los dos denotaron gran nerviosismo a la hora de atacar el aro, ambos buscaron a sus pívot, Reis para los norteños y Newsome en los playeros, pero no fueron claros en la culminación. El nerviosismo se hizo sentir, los seguidores de Malvin se levantaron de sus asientos, alentaron y con este apoyo, sus jugadores se agrandaron, Hoskin reingresó para ser determinante, puso un 5-0 para darle ventaja a los suyos (70-68) cuando quedaban tres minutos de encuentro.
El cierre fue a puro gol, los dos se intercambiaron en el marcador, 7-2 de los norteños para abrir tres (75-72) y minuto de López. El regreso del mismo no pudo ser el mejor para el equipo uruguayo, triple de Mazzarino para empatar en 75 a falta de 1:17. Los dos erraron, nervios en el cierre, ambos equipos tenían colectivas para dar, Winston lanzó para pasar y falló, el rebote de los brasileros le permitió tener una ofensiva larga y tranquila, jugaron un gran pick and roll entre Fúlvio y Ronald Reis, el pívot la hundió hasta los huesos para poner el 77-75. La última la tuvo Malvin, pero Ronald llegó a tapar el tiro de Winston y así los de Brasilia festejaron con un marcador final de 77-75, sellaron el pasaje a la final una fecha antes de culminar el cuadrangular.