Goes le ganó a Malvín desde la defensa con un rendimiento colectivo fenomenal.

Desde el inicio Goes marcó otra actitud en cancha. El Misionero sabía que la defensa era fundamental. A la prueba está, lo dejó en 68 puntos y ganó. La clave estuvo principalmente en el primer cuarto, donde se lo comió al playero, lo pasó por arriba permitiendo solo 4 unidades del rival en casi 9 minutos.

La planificación de Álvaro Ponce fue perfecta, demostró una vez más que es de los entrenadores más estudiosos a la hora de planificar los partidos. Todo esto fue acompañado por una postura defensiva perfecta, donde nadie se guardó nada.

Hubo trabajos monumentales como el de Brian García sobre Nicolás Mazzarino en el primer tiempo, o el de TJ Cummins en la toma de rebotes.

Pero en general todos cumplieron su rol, no falló una rotación, todos estaban prendidos demostrando inteligencia en las ayudas y saber a donde salir en momentos claves para robar o capturar rebotes defensivos.

Gran partido defensivo de Goes que ilusiona al pueblo Misionero con el batacazo.