Con un gran segundo cuarto, aportando 12 unidades, Micaela Martínez fue clave en el triunfo aguatero ante Olivol. Luego del encuentro dialogó con Básquet Total.
La jugadora comenzó refiriéndose a la importancia de la victoria y a su excepcional segundo chico: “El punto lo necesitábamos si o si. Es esencial el punto que ganamos. Personalmente no venia teniendo buenos juegos entonces me motivó a mi. Y este triunfo motiva a todo el equipo porque lo necesitábamos”.
“Lo principal es quedar en lo más alto para subir a la copa de oro y pelear ahí. Si no, al campeonato de la copa de plata, aunque prefiero jugar la de oro, así quedemos últimas”, agregó, hablando de las expectativas del torneo.
En cuanto al orgullo de defender al aguatero, dijo: “Yo jugué toda la vida en Aguada excepto tres años que me fui porque se disolvió el femenino. Pero soy del barrio, y con mi hermana compartí siempre, y eso es lo importante”.
“Es complicado porque tal vez le digo las cosas como no se las diría a las demás, porque obviamente es un trato diferente. Ella es sensible entonces cada vez que le digo algo la tiro para abajo, entonces últimamente opté por no decirle nada porque si no, nos peleamos y no nos hablamos más”, culminó entre risas, comentando sobre lo que significa para ella compartir cancha con su hermana.
Al finalizar, Micaela tomó un tiempo para analizar el crecimiento del básquet femenino en este último tiempo: “Estoy feliz por el crecimiento que ha tenido. El público que se vio hoy y que se ve más bien en la copa de oro es impresionante. Nunca me lo imaginé, desde chica que juego iban los familiares, y hasta por ahí nomás. Me parece muy importante el crecimiento que ha tenido y que va a seguir teniendo”.