Verdirrojo derrotó a Miramar por 100 a 91 en calidad de visitante y quedó muy cerca de decir presente en los playoffs.
Richard Pereira y Martín Rial fueron los árbitros del encuentro debido a que Leonardo Fernández nunca llegó. La dupla arbitral tuvo desaciertos para ambos lados.
El conjunto locatario saltó a la cancha con Marcelo Nessi, Matías Nicoletti, Martín Trelles, Martín López y Nick Waddell mientras que Verdirrojo bajó del Cerro con Martín Mayora, Gerel Simmons, Federico Cholaquides, Pablo Macanskas y Manuel Monteverde.
En los primeros minutos de juego la paridad fue el condimento especial de esa pasaje del cuarto. La visita proponía una buena defensa sobre Waddell y controlaban al foráneo. Mayora tomaba las riendas en la conducción del equipo y Cholaquides era el encargado de cerrar todas las jugadas. En Miramar el capitán López era el más desnivelante con su juego pero de a poco el extranjero villero crecía y generaba que Verdirrojo terminara los diez minutos iniciales 22 a 16 arriba.
En el segundo cuarto se pudo ver a un exuberante Simmons. El norteamericano del conjunto de Mathías Nieto estuvo insoportable en dicho cuarto y la visita sacó la máxima de 25 puntos. Miramar estaba sin ideas dentro del rectángulo de juego y sufría el movimiento colectivo de Verdirrojo. El partido estuvo parado por inconvenientes entre los parciales, además de algún entre dicho entre el banco locatario y el foráneo visitante. Ingresó Belase, descansó Macanskas pero se mantenía el juego mostrado hasta ese momento. Santiago Massa ingresó, aportó dos bombas y se fueron al descanso largo por 54 a 32.
Luego del mismo el conjunto locatario salió con otra cabeza. Empezó a defender más arriba en rectángulo de juego, Trelles corría la cancha, Wadell se hacía pesar en la pintura sacando ventajas sobre su marcador Leandro Bentancur. Imanol Asaravicius desplegaba su dinamismo clásico y le daba la versatilidad que había perdido en el segundo cuarto. Impuslado por su hinchada, los monitos eran otros. En 5 minutos del periodo el parcial era de 13 a 3. Verdirrojo no encontraba su juego y el gol le era esquivo. La efectividad no era lo misma y el nerviosismo se hacía presente en el equipo de Mathías Nieto. A pesar de eso, sobre el final del cuarto mostró otra imagen y logró parar el envío. Wadell atravesaba un gran momento en la noche y acortaba las diferencias a nueve puntos. Verdirrojo entraba a jugar el último arriba 67 a 58.
En el último período el gol se ausentó en los instantes iniciales debido al nerviosismo que se respiraba conjuntamente con alguna decisión confusa de los jueces. La balanza se terminó de inclinar para el equipo visitante gracias a un triple de Simmons a falta de 5.39 para que terminara el match. De ahí en más el equipo del Cerro logró mantener la regularidad gracias a los buenos minutos de Lucas Rodríguez. Verdirrojo cosechó una unidad vital que le permite ilusionarse aún más con estar peleando por los puestos de privilegios.