Uruguay fue derrotado por Argentina 72-67 en el marco del segundo amistoso ante los de la vecina orilla. Pese a esto la actuación fue sumamente positiva.
Sobre las 14:00 fue la naranja al aire al CENARD y el juego fue favorable para los albicelestes, que con una diferencia abismal en altura explotó el juego interno para abrir una brecha. Rodrigo Coelho fue de lo mejor en la celeste con un triple en el cierre del primer chico, dejándolo 16-8 para el local.
En los segundos diez minutos fue el quiebre para nuestros vecinos. Pereyra se destapó metiendo tres bombazos para sacar la máxima de 16 unidades. La celeste, a pesar de la diferencia de estatura logró ganar rebotes ofensivos para así cerrar la primera mitad 40-27 abajo.
El tercer periodo fue emocionante. Cuando parecía todo para Argentina nuestros muchachos sacaron adelante el partido. Peleando rebote tras rebote y defendiendo como nunca, los de Capalbo se fueron acercando y con doble de Agustín Ramírez tras un rebote ofensivo pasaron por mínima, reflejando el gran momento celeste, que corriendo la cancha se fue 54-53 arriba al cuarto final.
El ocaso fue levemente mejor para el dueño de casa, que con Giordano a la cabeza abrió cuatro de renta, diferencia que mantuvieron y pese a minutos pedidos por el seleccionador celeste para organizar al equipo, siguió siendo la misma, finalizando 72-67 para nuestros vecinos, que se llevaron los dos amistosos pero dejó muchas cosas positivas para los chicos, que no sólo dejaron todo, sino que también demostraron saber disimular con un buen juego las diferencias de altura rivales, así como físicas.
