Terrence Shelman, Trevante Drye y Tony Dandrige rayaron a gran nivel dentro de la noche soñada de Sayago.
A excepción de los equipos que contaron con Reque Newsome como ficha nacionalizada, la temporada pasada de Hebraica con Jimmy Boston y de Urunday con Ryan Blankson (con roles secundarios) no han sido buenas las experiencias de los planteles con tres extranjeros (uno nacionalizado), sobre todo de los que pelearon abajo.
Ayer Sayago mostró que está con serias intenciones de torcer esa realidad. El tridente de foráneos fue un espectáculo. No solo rindieron en materia individual, también se conectaron muy bien entre ellos y formaron un mini-equipo dentro del colectivo.
Ninguno quiso lucirse más que su coterráneo, las asistencias siempre buscaron las manos mejor ubicadas. No hubo momentos para egoísmo. El equipo siempre fue el bien común que permitió que brillaran los integrantes de este nuevo "Big Three".
Dandrige confirmó elogios de LUB, volvió a demostrar su valía. Drye, que llegó con más dudas que certezas, mandó un mensaje a Nuevo Malvín. No es un "5" determinante, pero tiene condiciones sobradas para jugar Liga. Para Shelman no hay calificativos, el capitán es el alma del cuadro y un ícono del barrio. Se retiró ovacionado por el público del Roberto Moro.
Entre los tres convirtieron 64 puntos -10 menos que todo Olimpia- y bajaron 19 rebotes (12 Drye). Noche perfecta.
