Estados Unidos aplastó a Serbia en cifras de 96 a 66 y se quedaron con la medalla de oro en Río 2016. Los norteamericanos alcanzaron su tercera presea dorada consecutiva, con un Kevin Durant exuberante. El encuentro sirvió como despedida para Mike Krzyzewski, que se retira luego de haber obtenido dos Mundiales y tres JJOO.

La final de los Juegos Olímpicos de Río 2016 tenía como protagonistas a Estados Unidos y Serbia. Los primeros llegaron a la instancia decisiva del torneo tras superar a España en semifinales por 82 a 76, mientras que los segundos aplastaron a Australia en cifras de 87 a 61. Los norteamericanos buscaban alcanzar su 15° medalla de oro y la tercera de forma consecutiva, luego de consagrarse en Pekin 2008 y Londres 2012. Los europeos querían alcanzar su primera presea dorada desde que compiten como Serbia, ya que en Moscú 1980 se habían coronado pero con el nombre de República Federal de Yugoslavia.

Los dirigidos por Mike Krzyzewski saltaron a la cancha con Kyrie Irving, Klay Thompson, Carmelo Anthony, Kevin Durant y DeAndre Jordan. Por su parte, los de Sasha Djordjevic comenzaron con Milos Teodosic, Stefan Markovic, Nikola Kalinic, Milan Macvan y Miroslav Raduljica. La terna arbitral la conformaron José Reyes (México), Boris Ryzhyk (Ucrania) y Juan Carlos García (España).

El encuentro disputado en el Arena Carioca 1 de la ciudad de Río de Janeiro, presentó un comienzo sumamente equilibrado, en el cual el conjunto serbio realizaba un excelente trabajo en el costado defensivo, que ponía muy incómodos a los jugadores estadounidenses, que tomaban lanzamientos muy apresurados. Con el correr de los minutos, mejoraron ambos equipos en ataque, USA lastimando a través de Klay Thompson que aprovechaba a la perfección el miss-match con Milos Teodosic, que no tenía la fórmula para poder detenerlo. Los europeos mostraban en ataque una buena circulación de balón, terminando la mayoría de los ataques en la pintura a través de Milan Macvan y Miroslav Raduljica. Sobre el cierre del primer periodo, Estados Unidos encontró soluciones en el banco de suplentes, sobretodo a través de Paul George y Kyle Lowry, que le permitieron a su equipo bajar un poco las revoluciones del comienzo del juego, para empezar a tener el control de las acciones como suele ocurrir en casi todos los partidos.

En los primeros minutos del segundo cuarto, los actuales bicampeones olímpicos pusieron el pie en el acelerador y en un pestañeo colocaron un parcial de 9-0. Los balcánicos supieron responder rápidamente con un triple de Stefan Markovic, para evitar la escapada del rival. No obstante, en ese momento apareció la figura exuberante de Kevin Durant, que con dos triples y una volcada, le permitía a su selección sacar una renta de 13 unidades (33-20). Serbia dependía en exceso de lo que generaba Teodosic, que aportaba sus puntos desde el pick central, pero que también habilitaba de buena forma a sus compañeros, que a la hora de definir terminaban fallando o siendo bloqueados por la defensa rival. El USA Team continuaba teniendo a un Durant totalmente desequilibrante que convertía en puntos todo aquella pelota que pasara por sus manos, anotando 18 de los 33 puntos de su equipo en el segundo periodo. Los primeros 20 minutos de juego se fueron con Estados Unidos al frente por 52 a 29, dejando en evidencia que cuando están enchufados son invencibles.

El arranque de la segunda mitad tenía al conjunto europeo con una alineación con cuatro jugadores abiertos y un interno, con el principal objetivo de lastimar desde el perímetro, para intentar una reacción que los pusiera a tiro. Sin embargo, con la presencia en cancha de Teodosic y Bogdanovic bajaba considerablemente la capacidad defensiva del equipo, situación que era explotada al máximo por los norteamericanos, que en un abrir y cerrar de ojos, lograban abrir una ventaja de 29 puntos (64-35). Promediando el tercer cuarto, con un buen ingreso de Cousins y Lowry, más un buen pasaje ofensivo de Anthony, le daban a USA la chance de plasmar en el rectángulo todos los atributos que poseen al tener un plantel extenso y plagado de figuras de la NBA. Los serbios observaban como eran ampliamente superados, mismo trámite que vivieron en la final del Mundial de España hace dos años, en la cual perdieron por 37 puntos.

Al iniciar el último periodo, el "Dream Team" tenía a su favor una renta de 36 unidades (79-43), que era lapidaria para las aspiraciones de los serbios. Los diez minutos finales sirvieron únicamente para observar el show de los jugadores norteamericanos y el intento de los dirigidos por Sasha Djordjevic de terminar el juego con un imagen mucho más digna. Finalmente, Estados Unidos se llevó la victoria en cifras de 96 a 66 y de esta manera se quedó con la medalla de oro por terceros Juegos Olímpicos consecutivos. Este partido fue el último de Mike Krzyzewski al frente del USA Team, ya que a partir del próximo torneo será Gregg Popovich el encargado de dirigir a la mejor selección de baloncesto del mundo. El "Coach K" asumió el cargo en 2006 y logró ganar dos Mundiales (Estambul 2010 y Madrid 2014) y tres JJOO (Pekin 2008, Londres 2012 y Río 2016).

En el ganador se destacó la brillante actuación de Kevin Durant, que convirtió 30 puntos, muy bien acompañado por DeMarcus Cousins, que aportó 13 tantos y 15 rebotes. Por el lado del perdedor, Nemanja Nedovic terminó como goleador con 14 unidades.