Olimpia ganó la final por la permanencia 101-89 y además se clasificó para la fase previa de Playoff donde seguramente enfrentará a Aguada. El equipo de Colón derrotó a Sayago en un partido que fue cambiante durante gran parte del mismo y que terminó con una diferencia abultada en el cierre.

 

Al barrio Palermo llegaron los dos equipos de la zona norte de nuestra capital con el mismo objetivo: salvarse del descenso. Un gran ambiente, con mucho colorido por parte de la gente de Sayago que acompaño en gran número a su equipo, lo mismo hicieron los parciales de Olimpia.

La pelota fue al aire y el comienzo fue todo de los de Colón, con un Cervi encendido en los primeros minutos, colocando siete de los nueve puntos de su equipo. Dilligard dominó a Allen en el comienzo, le ganó todos los rebotes de ataque y puso puntos que le dieron la primer ventaja a los de Colón (11-4). De todas maneras Sayago logró emparejar, aprovechando apresuramientos en ataque de Cervi y encontrando a Allen junto a Pablo Gallo. El primer cuarto fue para el conjunto de Lovera 21 a 17.

Para el segundo cuarto el juego cambió. Shelman comenzó a desnivelar luego de no haber anotado en el comienzo del encuentro. Allen mejoró en la marca sobre Dilligard y siguió aportando en ataque. Dos triples del “Bicho” Silveira mantenían al frente a Olimpia, pero el equipo tenía poco juego. Tornaría era bien marcado por Fernández y Galindo era controlado. Con un Shelman clave, Sayago logró pasar por primera vez a cinco minutos del final del primer tiempo. Dos jugadas de gol y foul del capitán, un triple de Veleda hicieron que los de Perdomo sacaran seis puntos. El parcial fue de 27 a 17 y el “saya” se fue ganando 44-38 al descanso.

Estaba mejor Sayago luego de haber pasado, la primer jugada del tercer cuarto le dio ventaja de ocho puntos. Sin embargo Olimpia no se deseperó, aprovechó malos pases de Allen y corrió la cancha. Tornaría creció al igual que Galindo y con un 13-2 en cuatro minutos pasó 51 a 46. También fue importante Delgado, el “Tico” frenó el goleo de Shelman y además puso seis puntos importantes. La figura de Tornaría en ataque le devolvió ventaja de siete a los de Colón pero Pereyra se enchufó dos jugadas y Shelman también aportó para que Sayago terminara abajo por mínima en el tercer cuarto en un chico de rachas.

El inicio del último capitulo fue sensacional, una lluvia de triples hizo al partido más emotivo y de final abierto. Hubo un gran crecimiento de Agarbado, sólido en la conducción y aportando puntos en un momento que los de Colón precisaban tiros exteriores. Una vez más Shelman se puso el equipo al hombro, Fernández lo acompañó con triples y los dirigidos por Perdomo otra vez sacaban una ventaja de seis, esta vez con cuatro minutos y medio por jugar.

En el momento que más lo necesitó su equipo, apareció Mauro Tornaría. El capitán sacó faltas, puso libres y dobles en penetraciones para igualar en 78 a tres minutos del final. Pero lo de Tornaría no paró ahí, le agregó dos triples al hilo en el momento más caliente y los de Colón abrieron ventaja de cuatro puntos.

Sayago sintió el tramo final, De Pena tiró de tres pero el tiro fue largo, el rebote fue entreverado pero quedó en manos de Olimpia. La lucha abajo del aro en esa jugada derivó en un balón dividido, muchas manos que pretendían hacerse de la pelota. El resultado fue un empujón de Shelman a Silveira, que llevó a la expulsión del norteamericano de Sayago.

Fue el momento más caliente de la noche, dentro de un comportamiento correcto tanto dentro como fuera del rectángulo. El capitán perdió la cabeza por un momento y su equipo a un minuto y medio hipotecó el partido. Fueron cuatro libres y pelota para Olimpia, previamente hubo conversaciones entre los jueces, la policía, dirigentes de los dos equipos y jugadores para que el juego terminara de manera normal.

Silveira puso los libres y le dio tranquilidad al equipo de Lovera, a puro libre de Cervi y Agarbado terminó ganando 101-89 el olimpista.

El resultado no refleja lo ajustado que fue el partido. Tornaría fue enorme, Galindo y Dilligard rindieron y además Agarbado junto a Delgado aportaron. Silveira con toda su trayectoria le dio una buena mano a un Olimpia que nunca pensó jugar una final por la permanencia pero que terminó festejando en un partido que tenía muchos condimentos en la previa. Esta vez Perdomo no pudo salvar a Sayago, pero el equipo no se guardó nada y luchó de igual a igual.

Hay que destacar también que no hubo ningún inconveniente al final, en un partido que se ha tornado clásico en las últimas temporadas.

Estadísticas oficiales

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